Ricardo Treviño | Redacción Nacional
Un matrimonio de profesores del Tec logró hacer sinergia entre la ciencia y el amor, trabajando juntos en el mismo campo de investigación y coordinando un laboratorio de ingeniería biomédica.
Se trata del Dr. Mario Moisés Álvarez, y su esposa, la Dra. Grissel Trujillo De Santiago, quienes son profesores investigadores del Centro de Biotecnología FEMSA del Tec.
Desde hace dos años el matrimonio está a cargo del Laboratorio de Cultivo Celular, donde realizan proyectos de investigación y asesoran a un grupo de 40 estudiantes.
Se conocieron en el Tec de Monterrey, donde tras varias colaboraciones como investigadores surgió una fuerte amistad, que a la postre se convirtió en amor.
Se casaron hace siete años en Roma, Italia.
“Nos complementamos: ella, con más 'expertise' en química, biología, biomateriales; y yo en modelación, termodinámica, cinética".
"Ese balance se refleja en las investigaciones que hacemos”, dice a CONECTA el Dr. Álvarez, ganador del Premio INSIGNIA Rómulo Garza 2016.
“Nos complementamos: ella con más 'expertise' en química, biología, biomateriales; y yo en modelación, termodinámica, cinética".
Fuera de laboratorio, ambos se divierten como cualquier pareja.
“Nos gusta mucho comer. Entonces buscamos lugares para cenar rico, comida oriental o mexicana; si se puede, cada fin de semana darnos nuestra escapada a ir a cenar”, comenta la doctora Trujillo.
“También nos gusta ir al cine, son las dos actividades que más disfrutamos como pareja”, añade.
"Buscamos lugares para cenar rico, comida oriental o mexicana (...) también nos gusta ir al cine".
La Dra. Trujillo destaca que uno de los objetivos como pareja dedicada a la ciencia es el brindar a sus alumnos los conocimientos necesarios para ser competitivos.
“Nuestro grupo nos lo tomamos muy en serio; nos encariñamos con la gente, y no son nuestros hijos, pero es familia. Es muy importante para nosotros ver que ellos progresen y que estén bien”, dice ella.
“Tenemos un sueño de transformar la forma en la que se hace ciencia".
“Tenemos un sueño de transformar la forma en la que se hace ciencia, creemos que los grupos de investigación en el Tec van a transformar el aparato científico de México”, añade él.
“Es un laboratorio de ingeniería biomédica, el Alvarez Trujillo Lab, es de los pocos que se dedican a este tipo de investigación no solo en México, sino en Latinoamérica”, añade su esposo.
"Compartir algo que te apasiona con tu pareja es hermoso”.
El laboratorio que dirigen es de los pocos que hacen este tipo de investigación en Latinoamérica y ambos han colaborado juntos en la publicación de más de 20 artículos en revistas científicas.
“Son logros de tu equipo de trabajo, pero se convierten también en logros de pareja. Es muy satisfactorio, mucho más llenador. Compartir algo que te apasiona con tu pareja es hermoso”, concluye el Dr. Álvarez.
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