El grupo de 3 investigadores del Tec Guadalajara integrado por Rita Fuentes, Alejandro García y Yenira Tlacuilo creó MioTracker, proyecto de base tecnológica que ayuda a realizar mediciones musculares durante rutinas de ejercicio o rehabilitación, lo que permitirá al paciente personalizar su tratamiento o rutina.
Escalamiento y validación tecnológica, ejecución de protocolo clínico, obtención de fondos privados y creación de plataforma digital para la visualización de resultados son los logros de MioTracker, el cual participó en el programa De la Ciencia al Mercado, coordinado por el Tec Guadalajara y la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología Jalisco (SICyT).
MioTracker es un dispositivo médico no invasivo, portátil y de fácil configuración que monitorea la actividad muscular en procesos de contracción y relajación durante rutinas de ejercicio y rehabilitación.
El dispositivo médico contribuye al seguimiento del estado de salud, principalmente en atletas de alto rendimiento, adultos mayores y personas con discapacidad motriz.
Esta innovación tecnológica se encuentra en proceso de validación para que posteriormente salga al mercado. Es liderado por Rita Fuentes, líder de la Unidad de Tecnologías Habilitadoras para la Aceleración del Desarrollo de Materiales del Tec Guadalajara y profesora de la Escuela de Ingeniería y Ciencias (EIC).
Dispositivo de ayuda
“Es importante que quiénes hacen ciencia no se queden con el conocimiento sólo en el laboratorio o en un artículo científico, sino que vayan más allá y que busquen bienestar de la sociedad”, comentó Fuentes.
La investigadora destacó que el proyecto comenzó a desarrollarse con estudiantes de la EIC, además de colaborar con fisioterapeutas para comprender sus necesidades.
“Me inspiré a seguir con la línea de investigación al ver la respuesta de los pacientes. Se trata también de motivar a más personas a que continúen con la terapia, que la lleven hasta el final y puedan ver sus resultados”, subrayó.
De esta forma, el servicio que ofrece el dispositivo médico MioTracker tiene 3 características:
- Dispositivo fácil de configurar
- Visualización del avance en dispositivos móviles y computadoras
- Plataforma de seguimiento.
“Es importante que quiénes hacen ciencia no se queden con el conocimiento sólo en el laboratorio".
“Funciona tomando las señales eléctricas que emiten los músculos. Para recuperarlas se realiza una medición de la corriente eléctrica transformada por los electrodos de plata o transductores de la corriente iónica”, explicó la académica.
Añadió que el objetivo de la plataforma de seguimiento es guiar el diagnóstico hacia lo que se denomina como medicina de precisión; es decir, una atención personalizada. “Cada persona configura lo que necesita según sus avances”, dijo.
De esta forma, la plataforma está dirigida al personal de la salud para definir con base en los resultados obtenidos la mejor terapia o medicamento para el paciente.
Respuestas con base en innovación
Es el segundo año que el dispositivo MioTracker participa en el programa de innovación de base científica y tecnológica “De la Ciencia al Mercado”.
De acuerdo con la profesora Fuentes, uno de los principales avances fue la consolidación de un protocolo de investigación clínica aprobado por un comité de ética y establecido según estándares de propiedad intelectual.
Actualmente, MioTracker continúa con el proceso de validación del dispositivo con el consumidor meta, así como con la consolidación de una patente y el escalamiento de la tecnología en el mercado internacional.
“Al crear estos programas y ayudar a que los desarrollos tecnológicos crezcan y se lleven al mercado, no sólo están cambiándole la vida al investigador, sino a la sociedad completa”, comentó la investigadora.
“Porque mucho de lo que hacemos, sino es que todo es pensado en cómo podemos resolver problemas reales”, destacó.
Diversificar conocimientos
La profesora resaltó que el desarrollo de los programas de base científica y tecnológica como “De la Ciencia al Mercado” ayudan a diversificar el entendimiento de las áreas y conocimiento, pues “si no entienden lo que haces y no lo compartes con la sociedad, no sirve”.
Finalmente, la doctora en ingeniería invitó a la comunidad estudiantil a colaborar en proyectos multidisciplinarios y a conocer diferentes áreas para crear y validar una propuesta de investigación o negocio.
“Buscamos que las investigaciones ayuden a las personas, siempre cumpliendo con la normativa y todo lo necesario para no fallarles”, concluyó Rita Fuentes.
El grupo de profesores continuará con las gestiones para avanzar en el proceso y lograr que el proyecto pueda salir al mercado en 2 años.
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