Ernesto Alonso Verduzco Castro, profesor del Tec Campus Irapuato ha creado junto a sus alumnos un proyecto de composta y horticultura que busca aprovechar los desperdicios orgánicos del campus y luego de la ciudad.
El proyecto tiene lechos de composta listos en donde los alumnos de la clase de Salud y desarrollo plantarán huertos para que la institución los use.
"Una gran ventaja de estos huertos urbanos es que son proyectos muy escalables y fáciles de implementar en casi cualquier lugar”, dijo el profesor Verduzco.
El proyecto está en progreso. Actualmente trabajan para que se convierta en una operación sostenible y que se difunda entre la comunidad para que sea una práctica común en la ciudad.
De acuerdo al profesor Verduzco, el huerto tiene varios beneficios: es agricultura urbana, lo que le permite aprovechar materiales como aguas residuales y residuos sólidos como frutas, vegetales, hojas secas, y dar buen uso a espacios como baldíos.
En su opinión el proyecto, al volverse parte de la comunidad, podrá además proveer una fuente de alimento y trabajo para las personas y realizar aportaciones ambientales, como espacios verdes.
Para el profesor Verduzco esta iniciativa tiene la intención de “mostrar que puede haber un destino diferente para esos recursos, esos desperdicios”.
La curiosidad, el catalizador de la iniciativa
El proyecto comenzó en el semestre enero-mayo del 2021. Sus alumnos querían aprender más sobre compostas y huertos en sus hogares, y al ver tanto entusiasmo por la idea, el profesor Verduzco decidió crear un proyecto práctico de horticultura dentro del campus.
El profesor planteó la iniciativa a los directivos del Tec de Irapuato, quienes dieron luz verde y un espacio para realizar la operación.
La planeación y el desarrollo del proyecto
El profesor admitió que la clave del proyecto es simplemente planear de forma adelantada el tamaño de la operación, para saber qué recursos tienes a tu disposición, cuánto tiempo tomará y con cuánta ayuda cuentas.
Sin embargo, el académico aclaró que eso no significa que no hay que tomar precauciones: los materiales que dependen de la temporada y el tamaño del proyecto son factores considerables que pueden determinar su funcionalidad.
El profesor Verduzco indicó que en ocasiones era necesaria un poco de creatividad y ajustes como le sucedió en diciembre, donde tenía que ir a mercados para recolectar fruta y verdura echada a perder para mantener la composta en un estado adecuado.
Un proyecto a largo plazo
El proyecto comprende varias etapas y que son :
- Fase de composta: creación de grandes lechos de composta en el campus utilizando los desperdicios orgánicos del Tec.
- Fase de horticultura (actual): Crear pequeños huertos en las camas de composta.
- Fase de difusión: en esta fase, el proyecto se compartirá y expandirá a través de las comunidades y familias de los alumnos.
- Fase de integración: en esta fase, el proyecto será adoptado por las comunidades y se volverá parte de ellas, volviéndose algo cotidiano y sustentable.
La meta, de acuerdo a lo señalado por el profesor del Tec Irapuato, es que los alumnos se adueñen de los conocimientos y los difundan y desarrollen en sus hogares y vecindarios para expandir la escala de esta iniciativa.
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