La historia de Alan es el claro ejemplo de lo que el trabajo y constancia son los aliados de los emprendedores; se trata de un sueño que logró hacerse realidad.
Tras 10 meses de trabajo constante y dedicación, Alan Santoyo da por terminada la construcción de su prototipo para un Go Kart, el cual cuenta con un motor de gasolina, 7 caballos de fuerza, tracción trasera, frenos de disco y dirección no asistida, pesa menos de 100 kg y alcanza 55 km/h, explica Alan.
“A mí desde chico me han gustado los coches, es algo que me apasiona mucho” afirma Alan. Explica que su padre fue una pieza importante a lo largo del camino, pues él fue quien lo animó a comenzar y lo inspiró desde el principio, además de brindarle los conocimientos necesarios para llevar a cabo el proyecto.
En cuanto a su experiencia, comenta que lo más laborioso fue hacer la carrocería pues es un proceso muy detallado que requiere de mucho tiempo. A pesar de eso, Alan expresa que la mejor parte fue trabajar y aprender por su cuenta; fue una experiencia increíble, sin importar el resultado final.
Aun siendo este un proyecto personal, los valores de PrepaTec formaron parte de la historia de Alan: “La PrepaTec me ayudó mucho en mi formación, me ayudó a enfocarme y decidirme en lo que quería hacer.” Comenta que sus profesores también lo apoyaron para seguir con su proyecto, mostrando que la escuela va más allá del salón de clases.
La historia de Alan es el claro ejemplo de lo que el trabajo y constancia son los aliados de los emprendedores; se trata de un sueño que logró hacerse realidad. “Al principio creí que era mucho trabajo, que iba a ser muy difícil hacer esto, pero lo logré”, afirma el alumno.
Para cerrar, Alan invita a quienes tengan un proyecto o un sueño que quieran hacer realidad, a seguir adelante: “le recomendaría, a quien quiere seguir con sus sueños; que sí lo haga, sí se puede. Si es necesario, busca un poco de ayuda, pero todo es posible”.
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