Con tan solo 15 días previos al concurso Aconcagua Glamping, organizado por la Quechua Architecture Competition, Juan Jafet Monterrubio Delgado, Karla L. Yañes Vázquez y Patricio F. Gonzáles, alumnos de arquitectura en el Tecnológico de Monterrey campus Querétaro, diseñaron el proyecto que los llevaría a ser finalistas de manera inesperada.
“Quechua Architecture Competition es un grupo de arquitectos bajo la iniciativa de desarrollar concursos de diseño en América Latina, con el fin de desafiar a los diseñadores jóvenes a demostrar sus habilidades al mundo mediante concursos conceptuales que promueven la arquitectura local”, explicó Jafet Monterrubio para CONECTA.
El concurso Aconcagua Glamping, cuyo significado es “acampar con glamour”, consistió en crear una propuesta de diseño arquitectónico para Aconcagua, Argentina, conocida por ser la mayor cumbre de la cordillera de los Andes.
Un reto de altura
Para este concurso, los participantes debieron cubrir ciertos lineamientos, como estructuras temporales y semitemporales que se pudieran montar y desmontar dependiendo del aforo de campistas, recepción, áreas comunes como comedor y regaderas, entre otros.
“Cumpliendo con los requerimientos del concurso, nosotros añadimos como idea propia espacios polivalentes para meditar y descansar, miradores, rampas para caminar hacía la montaña, arquitectura regenerativa y sustentable”, añadió Jafet.
El trabajo fue arduo, y si bien colaborar a la distancia debido al COVID-19 y el no poder ir físicamente a Argentina para familiarizarse con el terreno y los espacios representó un reto considerable, los alumnos lograron crear un diseño que se adaptara al contexto de la ubicación, sin ser invasivo, y respetando siempre el paisaje de las montañas.
“Lo más retador y emocionante que vivimos fue cuando nos dieron la noticia de que habíamos pasado a la final y teníamos dos días más para hacer ajustes, fueron días sin dormir”, comentó el integrante del equipo finalista.
Lo anterior, fue posible gracias al compromiso de todo el equipo, incluyendo la participación de su mentor, el profesor Carlos Cobreros Rodríguez quien en todo momento brindó apoyo académico pero también moral.
“El profesor Carlos siempre se mostró interesado y emocionado, se sintió siempre como un proyecto de todos porque en todo momento nos brindó apoyo y conocimiento a través de material relevante para el proyecto”, Subrayó Jafet en entrevista para CONECTA.
El profesor y arquitecto Carlos quien es además, Doctor en Ingeniería y Máster en Arquitectura, Energía y Medio Ambiente, fue un factor primordial en el seguimiento de esta experiencia, pues, fungió como guía durante todo el proceso de diseño y creación, su experiencia en este campo impulsó a Jafet, Karla y Patricio a poner en alto a México.
Planes a futuro
Aconcagua Glamping fue el motor de estos jóvenes para seguir participando en concursos retadores que impulsen y pongan en práctica todos los conocimientos y habilidades desarrolladas en su alma máter, el Tec.
- Proyecto LAGI en Nevada: Propuesta de una obra regenerativa para el paisaje desértico del Oeste de Estados Unidos.
“Si no dormimos nada esta vez, la siguiente vez dormiremos menos, de eso estamos seguros porque queremos seguir superándonos”, concluyó Jafet Monterrubio.
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