El Tecnológico de Monterrey campus Puebla trabaja en la tercera edición de la iniciativa “Voz de las Víctimas”, que genera competencias en alumnos de derecho y operadores del sistema en el involucramiento a fondo de casos y el nuevo sistema penal.
María José Montes de Oca Sánchez de la Barquera | Campus Puebla
“Voz de las Víctimas” es un proyecto conjunto entre el Tec de Monterrey y la Universidad Estatal de Arizona, en el que alumnos de derecho y operadores del sistema penal reciben capacitación para tener una mejor comunicación y proporcionar una asesoría legal conveniente.
Surge de la Iniciativa Mérida, cuyo objetivo en lo referente a las leyes es mejorar las técnicas en el uso del sistema de justicia penal en México. Dicha iniciativa también contempla el combate al narcotráfico entre otros temas.
“Es un acuerdo entre Estados Unidos y México que abarca un contexto amplio; el departamento que patrocina el proyecto busca la mejor implementación del sistema de justicia penal en México” señala Stephania Veeckss, Coordinadora del proyecto de campus Puebla.
A raíz de la reforma a las leyes mexicanas y tras la implementación del actual sistema de justicia, comenzaron a darse deficiencias en los procesos, mismas que son analizadas y atacadas desde las clínicas y talleres impartidas por el Tec.
La meta de “Voz de las Víctimas” es lograr 32 capacitaciones orales en un total de 720 estudiantes, profesores, funcionarios públicos y abogados practicantes.
Por una parte ofrece a los alumnos un taller de técnicas en litigación oral, con la idea de que en una semana puedan aprender las técnicas de la última etapa, que es el juicio oral.
En esa última etapa temas como la interrogación a víctimas y cómo prepararlas son abarcados, con el objetivo de empoderarlas.
Gracias a la capacitación, los involucrados estarán preparados para desenvolverse de una mejor forma dentro de los juicios orales.
“Cuando sales y te das cuenta lo que sucede alrededor y es diferente a lo que vives, si genera un impacto; adicional al aprendizaje práctico y al crecimiento académico, el crecimiento personal que les dan las clínicas a los alumnos es muy importante”.
Por otro lado están las clínicas efectuadas con la idea de que, una vez convertidos en asesores, puedan interactuar con el sistema de una forma activa.
A su vez las clínicas sirven como prácticas profesionales, al incorporar a los alumnos con alguna institución para que puedan proporcionarles con carpetas de investigación.
El objetivo es que los alumnos sean empáticos en el trabajo con las víctimas, para ir más allá de un asesoramiento. Adicionalmente, la idea por parte del Tec es que se les proporcionarles un acompañamiento académico.
El proyecto que inicialmente arrancó en 2017 en Puebla y Toluca, hoy se implementa también en los campus Monterrey, Chihuahua y Estado de México.
Al día de hoy el programa lleva celebrados siete talleres y tres clínicas de manera semestral.
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