Desde niño, Alejandro Gutiérrez se interesó por la carne asada y convirtió su hobby en una empresa y en su estilo de vida
“Después de muchos emprendimientos y muchos fracasos, en el peor momento de vida, hicimos un concurso de parrilladas, así nomás sin pensar en nada”.
Así fue como Alejandro Gutiérrez organizó en 2012 junto con su novia el evento Grill Master, que se convirtió en uno de los campeonatos de parrilladas más grandes de Latinoamérica.
Esto lo llevó después crear la Sociedad Mexicana de Parrilleros (SMP), empresa que gira alrededor del fuego y carne asada sazonada con convivencia, que ofrece productos, recetas, tips y más.
El egresado de la Ingeniería en Diseño Industrial en el Tec de Monterrey tuvo antes varios empleos y emprendimientos, pero ninguno lo "prendió".
Fue una idea basada en asar carne, habilidad aprendida de su padre, en un momento de crisis existencial lo que cambió su vida para siempre.
“Era un hobby que se hizo obsesión y esa obsesión se convirtió en mi estilo de vida”, comenta Alejandro, de 35 años.
“Era un hobby que se hizo obsesión y esa obsesión se convirtió en mi estilo de vida”.
La crisis existencial que lo llevó a encender su pasión
Alejandro no sabía qué quería lograr con su vida luego de graduarse. Recuerda que duró años buscando su verdadera pasión.
Llegó a vender comida al vacío, comercializar paellas, trabajar en bienes raíces e incluso hacer dibujos por pedido, pero ninguno le apasionaba.
“Fue muy difícil, porque te comparas con mucha gente y te preguntas '¿por qué no puedo?'”, señala.
A pesar de sentirse perdido en esa etapa de su vida, nunca paró de buscar qué podía hacer o qué idea o negocio podía emprender.
Así nació el concurso anual de parrilladas
Fue un día que al estar sentado frente a un televisor vio algo que cambiaría su vida: un concurso de carnes asadas, que le recordó cuando de niño veía a su papá hacer esto.
Al ver esta imagen se motivó para ingresar a uno de estos concursos únicamente por gusto.
Se dio cuenta que no existía algo así en México. Fue entonces en que, sin pensar en nada más, decidió crear uno en Monterrey.
Por fin, llegó el momento y se lanzó con su novia para hacer el evento Grill Master en el 2012, que se convirtió en uno de los campeonatos de parrilladas más grandes de Latinoamérica.
“El amor a la parrilla siempre ha estado desde chiquito y nunca lo había visto como un negocio porque era un hobby que tenía”, indica.
El Grill Master crecería año con año para convertirse en una competencia anual al que se sumaría la marca de tiendas de supermercados HEB como patrocinador y organizador.
A la fecha, en esta competencia se reúnen miles de parrilleros de México, Estados Unidos y países de Latinoamérica para demostrar sus habilidades, hacer alianzas y compartir consejos.
“Es el primer proyecto que hago sin pensar en dinero, más por un significado personal y es el que más me ha retribuido”, narra Gutiérrez.
“Es el primer proyecto que hago sin pensar en dinero, más por un significado personal y es el que más me ha retribuido”.
El nacimiento de una sociedad de carbón, leña y fuego
Con una pasión renovada, Alejandro decidió en el 2013 llegar más lejos con la creación de la Sociedad Mexicana de Parrilleros (SMP), una comunidad para los parrilleros que participaban en su concurso.
En este espacio inició con la comunidad compartiendo recetas, tips del asador y cursos sobre cómo asar carne, tradición cultural del norte de México.
Esta vitrina le sirvió para lanzar su marca de productos relacionados con las carnes asadas: sazonadores, accesorios, entre otros.
Ahora, su empresa tiene 195 productos que se venden en mil 500 puntos en México y en Amazon en Estados Unidos.
SMP también ofrece catering en eventos de hasta 15 mil personas.
Esta comunidad actualmente tiene capítulos en Nuevo León, como en San Pedro y Santiago; y en otras ciudades como Guadalajara, Mérida, Ciudad de México y Tijuana, entre otras.
Con "fuego alto" existe el riesgo de quemarse
Luego de establecer la SMP lo más difícil vendría todavía, ya que Alejandro recuerda que las personas no creían en su proyecto y en dos ocasiones ha terminado en el hospital.
“Tenía pulmones de 84 años por el humo de la leña y el carbón”, menciona Alejandro quien además se enfrentó 3 operaciones de hernias discales debido al esfuerzo diario.
Ante esto Alejando también comenta que tardó años en responder a la pregunta: "Si tu empresa no existiera ¿el mundo sería mejor o peor?"
"Me pude contestar después de 2 años. Si este proyecto no existiera no sería feliz. No tendría herramientas para juntarnos alrededor del fuego y generar lazos.
"El poder compartir una receta por redes sociales, dar un curso o incluso esta plática y que alguien agarre algo de esto se junte con su familia y amigos y comparta. Eso es la SMP", indica.
"Si este proyecto no existiera no sería feliz. No tendría herramientas para juntarnos alrededor del fuego y generar lazos".
Su infancia alrededor de una parrilla
Al recordar cómo inició su pasión por hacer parrilladas o carnes asadas, como se les conoce en su natal Monterrey, Nuevo León, dice que el "culpable" fue su padre.
“Las primeras veces que me acuerdo era cuando íbamos a pescar. Mi 'jefe' nos llevaba a mi hermano y a mí desde los 5 años”, recuerda Alejandro.
Relata que su padre llevaba una cabeza de res para hacer barbacoa, e iniciaba desde las 5 de la mañana.
“Me le pegaba y andaba con las pencas de maguey e iba a ver cómo prendía el horno. Ya en la noche ponía un cabrito y me acuerdo que se hacía una salsa en un molcajete gigante. Yo estaba encantado”, narra el empresario.
"Fuego a prueba de huracanes"
Cuando inició la pandemia en México en 2020 Alejandro tuvo que suspender el Grill Master HEB, la competencia que había iniciado su empresa.
Eso implicó el reto de recibir menos dinero, pero Alejandro decidió crecer y la SMP tuvo un impulso en el comercio electrónico.
“Tuvimos que aprender muchas cosas de un día para otro y la logística no daba. Fue un esfuerzo físico y emocional para toda la empresa”, menciona.
El esfuerzo de él y sus empleados hizo a la SMP crecer un 35% en colaboradores y crear cursos digitales así como nuevas ideas para sobrellevar la pandemia.
A la par también continuaron capacitándose en un programa llamado Enlace+ del Tec de Monterrey donde algunas empresas reciben asesoría de 393 mentores expertos de empresas destacadas.
“La SMP nació en una de las peores crisis económicas y de violencia, nacimos de la nada. Creo que esta crisis nos vino a dar un empujón. Nuestro fuego es a prueba de huracanes”, indicó.
Tiene "lumbre" para rato
Además de los cursos y productos, Alejandro ha dedicado parte de su tiempo en apoyar iniciativas sociales mediante su Fundación SMP.
Ha emprendido acciones como crear huertos para consumo local para reducir su huella de carbono, así como realizar donativos a asociaciones que luchan contra la violencia de género, entre otras.
También ha organizado cursos para que las mujeres se acerquen a las carnes asadas.
Ahora Alejandro busca crear un centro parrillero en Santiago, Nuevo León, con opciones educativas desde la labor de agricultura, ganadería y las parrilladas.
"La visión es tener capítulos en ciudades de Estados Unidos, Sudamérica, Europa y Asia. Internamente decimos que somos la Sociedad Mundial de Parrilleros".
"La visión es tener capítulos en ciudades de Estados Unidos, Sudamérica, Europa y Asia. Internamente decimos que somos la Sociedad Mundial de Parrilleros".
Es así como luego de 8 años después de haber "encendido" su sueño y ayudar a compartir tradiciones, Alejandro asegura que no se arrepiente de lo que ha logrado, aunque haya sido difícil.
“El que esté un hijo con su papá y estén platicando alrededor del fuego es el propósito de la SMP, es nuestra razón de existir. El fuego nos une", finaliza.
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