¿Qué puede hacer la ciudadanía para protegerse de la inseguridad que ha tenido una alza en las últimas semanas en México?
Juan Carlos Piña, profesor de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Tecnológico de Monterrey y especialista en seguridad pública, explicó la razón de esta serie de acontecimientos violentos.
“Los recientes hechos violentos que sufrieron algunas demarcaciones de nuestro país, de acuerdo con las declaraciones del Estado, son una respuesta ante la detención de líderes de cárteles o criminales que operan en nuestro país”, explicó Piña.
Entre el 9 y el 14 de agosto, los estados que se encuentran en las zonas norte y Bajío del país vivieron una serie de enfrentamientos entre grupos armados, bloqueos de carreteras, incendios de vehículos y locales comerciales.
Ante esto, el experto también en procuración de justicia, compartió lo que puede hacer la ciudadanía para tratar de evitar afectaciones por estos hechos violentos.
La cultura de denuncia y grupos vecinales vs la violencia
El especialista indicó que la denuncia ciudadana y la comunicación entre vecinos son de las principales herramientas contra la inseguridad provocada por los grupos criminales.
“La seguridad es un trabajo conjunto, donde es necesaria la participación ciudadana”, dijo.
El experto explicó que se tiene que recuperar la confianza en las instituciones y fomentar la cultura de denuncia.
"Si ves algún tipo de anormalidad denúnciala", externó.
El académico recalcó el fortalecimiento de la comunicación y de coordinación entre vecinos, así como establecer mecanismos para cuidarse entre sí.
"Exijan vías de comunicación entre la sociedad y la autoridad. Hagan espacios de participación comunitaria donde describan los problemas que viven".
Piña dijo que estas acciones son indispensables para que las autoridades implementen acciones operativas o políticas públicas para combatir a la delincuencia de manera focalizada.
"La información y participación desde la sociedad civil es indispensable”, enfatizó.
Claves para entender este tipo de disturbios en el país
El especialista en seguridad pública también explicó la ola de violencia fue un abierto desafío al Estado e incluso una especie de medir fuerzas de control.
"Muestran que existe un esquema de coordinación negativo y violento entre los integrantes de las organizaciones criminales capaces de paralizar la acción del Estado", dijo.
Asimismo, dijo que la secuencia de sucesos dejaron ver que la estrategia de seguridad no está teniendo los efectos esperados.
"Además, muestran que no hay una coordinación efectiva entre los diferentes órdenes de gobierno.
"Si el gobierno no actúa adecuadamente, va a terminar cediendo territorio y control a las células del crimen organizado".
"Si el gobierno no actúa adecuadamente, va a terminar cediendo territorio y control a las células del crimen organizado".
¿Cuáles son las posibles soluciones al problema?
El profesor del Tec detalló que estos disturbios están focalizados en zonas estratégicas. Por ejemplo, la frontera con Estados Unidos es una área de venta de drogas y en la zona del Bajío, se da la extracción ilegal de combustible.
Las demarcaciones donde se registró esta ola de violencia son: Tijuana, en Baja California; Ciudad Juárez, Chihuahua; así como localidades de Jalisco y Guanajuato.
“Son zonas geográficas donde las células del crimen organizado tienen la oportunidad de crecer, de asentarse, y tener operación financiera”.
Una de las respuestas del gobierno ante estos disturbios fue desplegar militares en las zonas con conflictos.
Pero, Piña recuerda que la estrategia de militarización que hubo en el sexenio de Felipe Calderón (2006-2012) “derivó en un uso excesivo de la fuerza del Ejército, lo que provocó muchas recomendaciones y responsabilidades en materia de derechos humanos para nuestro país”.
Por lo que, considera que el exceso de la fuerza puede resultar contraproducente para hacerle frente a este problema y propone hacer uso de la tecnología e inteligencia.
“Al crimen organizado se le combate con un Gobierno organizado y con inteligencia”.
“Al crimen organizado se le combate con un Gobierno organizado y con inteligencia”.
Lo primero que se recomienda es hacer una depuración efectiva dentro de las instituciones para eliminar cualquier alianza con el crimen organizado.
“Que el Estado no se permita colaborar, involucrarse o ceder ante la corrupción”, externó.
Después, sugiere identificar los factores de riesgo y crear estrategias para anticiparse a las zonas identificadas.
“El trabajo de inteligencia consiste en procesar la información que se obtiene de las denuncias, del mapa de delitos, de las cámaras de videovigilancia, Y a partir de esto, desplegar operativos coordinados y dirigidos en los puntos clave”.
Y por otra parte, ser capaces de anticiparse a estos grupos delincuenciales.
“No se trata de improvisar y sacar al Ejército para la captura de dos capos porque alguien dijo que se reunieron en una zona. Antes se debe verificar, planear y cuidar todos los aspectos de la operación. Tener un plan para cualquier escenario”, finalizó.
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