José Longino Torres | Redacción Nacional
Hay una manera de recordarle a tu cerebro todos los días lo que deseas y así lograr cumplir las metas propuestas de Año Nuevo: el pizarrón de los sueños.
Paloma Sánchez Castillo, coordinadora académica de la Certificación Internacional en Coaching Ejecutivo y Equipos de Alto Desempeño, que oferta Educación Continua del Tec de Monterrey, explicó para CONECTA esta técnica.
"Es una herramienta que te permite tener visualmente y en conjunto todo lo que deseas para ti en un tiempo determinado", explicó.
"Es una manera de recordar lo que quieres y que de esta manera estar alerta para las oportunidades que te acerquen a esos sueños. El cerebro suele ignorar aquello que no reconoce"
Para hacer un pizarrón de los sueños, explicó seguir estos pasos:
- Utiliza cualquier base como cartulina, hielo seco, un pizarrón vintage o inclusive una sección de tu pared.
- Dibuja o pega recortes, fotografías o cualquier manera creativa que se te ocurra de cómo te gustaría verte o estar.
"Por ejemplo, si este año te quieres casar, puedes recortar de una revista la foto de una pareja feliz casándose o una foto de Internet donde le pongas tu cara al personaje dentro de un auto como el que te gusta. Así cada una de las cosas que desees, de cada uno de tus propósitos", indicó.
Este ejercicio no se trata de visualizar y atraer por leyes metafísicas, explicó.
"Es una manera de recordar lo que quieres y que de esta manera estar alerta para las oportunidades que te acerquen a esos sueños.El cerebro suele ignorar aquello que no reconoce", aseveró.
Precisó que es importante ser lo más preciso y específico posible.
"Si quieres una boda en la playa, asegúrate que la foto sea en la playa que te gustaría que fuera, o bien el auto de color, modelo y año que te gusta".
Una buena idea sería primero hacer el pizarrón de los sueños y después convertir esos sueños en objetivos SMART.
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LOS FACTORES QUE TE FRENAN
Paloma destacó tres factores principales por las cuales las personas no cumplen con los propósitos de Año Nuevo:
- No identificar los motivadores detrás del propósito
"Es importante identificar para qué quiero lograr ese propósito o en quien me voy a convertir cuando lo logre, qué va a aportar en mi vida o quiénes se van a ver beneficiados. Esas respuestas te pueden dar la motivación que no has encontrado hasta hoy".
- Los propósitos son deseos que nunca se convierten en objetivos claros
"Algo fundamental es que el propósito sea SMART, es decir, que sea específico, medible, alcanzable, retador y que tenga una fecha o tiempo determinado para lograrlo. Eso deja de ser un buen deseo para convertirse en acciones concretas que puedo medir y por lo tanto darle seguimiento".
- Los propósitos son tan inalcanzables que terminan desmotivando
"Es muy común que hagamos propósitos sobre cosas que nunca hemos hecho (...) Hay una filosofía que es el principio del Kaizen, algunos le llaman mejora continua. Pequeños logros continuos hacen el hábito y a veces el hábito es más poderoso que la motivación".
Paloma señaló que si tienes tiempo queriendo lograr un propósito y sigue siendo importante, hay que buscar nuevas maneras de hacerlo, como retarte con un amigo, ponerte una recompensa o bien, buscar el acompañamiento de un coach ejecutivo o de vida.
"Y si tienes muchos propósitos enfócate en 1 a la vez o máximo 3. Sería mejor terminar el año con 3 objetivos logrados que con 12 pendientes", finalizó.
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