La educación continua ha tenido un impulso en los últimos años por lo que rectores iberoamericanos analizan su impacto e importancia.
Rectores de universidades iberoamericanas analizaron la importancia y el impacto de la educación continua en lo laboral y social, así como para los retos actuales y futuros del mundo.
“Antes (la educación continua) era una actividad adicional, pero ahora la analizamos como una actividad clave”, señaló David Garza, rector y presidente ejecutivo del Tec en el Encuentro Internacional de la Red de Educación Continua de Latinoamérica y Europa (RECLA) 2022,
Participaron además Ignacio Sánchez, rector de la Pontificia Universidad Católica de Chile; Raquel Bernal, rectora de la Universidad de los Andes, de Colombia; y Miguel Castro, rector de la Universidad de Sevilla.
Durante el panel, dirigido por Margarita Guarello, directora de RECLA, los directivos compartieron además la labor que realizan desde sus universidades para explorar e integrar la educación continua a sus planes de estudio.
Este encuentro fue organizado por el Tec de Monterrey y la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), en el campus Monterrey.
La creación de nuevos modelos de educación
Los panelistas advierten de cambios a la educación que traerán consigo los retos actuales y futuros, incluyendo tanto a la educación tradicional como a la educación continua.
Avances en tecnología, cambios en el campo laboral, económico y geopolítico, las características de los jóvenes hoy y en el futuro y hasta los retos como el cambio climático y la sostenibilidad son algunos de los que mencionó Bernal.
“Hay que formar para diferentes niveles educacionales también. Eso cambia nuestros modelos y va a requerir de mucho conocimiento”, añadió la rectora.
Algunos de estos cambios, señala David Garza, han iniciado o se han acelerado durante la pandemia que trajo consigo la necesidad de explorar nuevos modelos de enseñanza.
“Digitalización, aspectos como la “Gran Renuncia” y los cambios en las cadenas de suministros; todo eso trae fuertes presiones a los distintos sectores de la sociedad”, indicó el rector del Tec de Monterrey.
De igual manera, Garza señala que la educación del futuro puede ser multidiversa, con aspectos como la multimodalidad que incluye modelos híbridos, presenciales o a distancia.
“También multietapa. Estamos acostumbrados a la inmersión en las universidades y a los 4 años egresar.
“Creo que esto va a continuar, pero se va a complementar con el hecho de que habrá personas que entren y salgan en diferentes etapas de la vida”, explicó Garza.
Además, señaló que el rol de las universidades no solo es el de crear contenido, sino también curar y validar contenido que ya existe e integrarlo en la oferta de educación continua.
“Hay técnicas, metodologías y herramientas para las necesidades actuales y que se encuentran en otros sectores fuera de las universidades, pero somos nosotros quienes tenemos esa credibilidad”, mencionó el rector del Tec.
Impacto laboral, educativo y social de la educación continua
La rectora Raquel Bernal aseguró que debe existir una mayor comunicación y trabajo colaborativo en el tema de la educación continua entre las universidades y los actores del campo laboral.
Bernal señaló que en una encuesta solo el 11% de los empleadores cree que los recién egresados tienen las competencias laborales necesarias, mientras que el 89% piensa que no es así.
Por otra parte, un 96% de académicos piensan que los egresados sí poseen dichas habilidades, contrastando con la opinión del campo laboral.
“Esto requiere que estemos más articulados con nuestro contexto, no solo con la industria, sino incluso ahora tenemos una gran exigencia de nuestros estudiantes que buscan aprender lo que necesitarán en sus trabajos”, añade Bernal.
De igual manera, el rector Ignacio Sánchez señala que la educación continua desde las universidades no solo beneficia al sector empresarial o laboral, sino también deberá impactar en aspectos benéficos para las comunidades.
“Al igual que la investigación, creo que la educación continua tiene que ver con el desarrollo de conocimiento y hay que exportarlo a la comunidad.
“Sabemos que hay egresados que tienen que renovar lo que han estudiado. Los desafíos de la sociedad van cambiando y modificando las necesidades de lo que tenemos que aprender y enseñar”, aseveró Sánchez.
Dentro de la oferta de educación continua, el rector Miguel Castro aseguró que las estructuras formativas han ido cambiando y seguirán haciéndolo con el paso del tiempo para adaptarse a las necesidades de educación durante la vida.
Micro credenciales, cursos híbridos, nuevos espacios, modelos y enlaces con empresas y sociedad son algunas de las que menciona.
Buscan trabajar en conjunto
Durante el panel los rectores abordan la colaboración no solo entre las universidades y sus entornos sociales y laborales, sino también destacan la importancia de la colaboración entre las universidades.
En Europa, señaló Castro, se han realizado esfuerzos para trabajar por la educación desde alianzas con diversos centros educativos quienes colaboran para dar respuestas conjuntas a las necesidades del entorno.
Por su parte, los rectores latinoamericanos señalan que dentro de sus universidades ya se trabaja en esfuerzos como la creación de vicerrectorías que atienden los asuntos internacionales y trabajan en conjunto con otras instituciones educativas.
Un ejemplo de esta colaboración es La Tríada, conformada por el Tecnológico de Monterrey en México, la Universidad de los Andes en Colombia y la Pontificia Universidad Católica de Chile, quienes incluyen en su oferta educación continua
“Tenemos como objetivo potenciar la educación continua a nivel global. Es importante que alcancemos un mayor impacto”, señaló Sánchez.
“La necesidad de trabajar interdisciplinariamente y colaborativamente es indispensable”, añadió Bernal.
Educación continua con impacto social
Los rectores terminan señalando que la educación continua no solo debe tomarse como una herramienta, sino como un camino para mejorar aspectos sociales e incluso promover la inclusión y equidad.
“Debe llegar a los sectores menos favorecidos, estimular a hombres, mujeres, adultos y jóvenes. La educación continua tiene que ser parte integral de los futuros planes de las universidades”, aseveró Sánchez
“Yo creo que el área de la educación continua es una manera de aportar a la sociedad. No solo para actualizar y adquirir conocimiento,sino para aportar al desarrollo de la actividad de nuestros países”, mencionó Bernal.
Otro de los retos que señala la rectora de la universidad colombiana es la necesidad no solo de ofrecer contenido académico dentro de las opciones de educación continua, sino también competencias sociales y para crear buenos ciudadanos.
“No hay que olvidar nuestro rol fundamental de crear buenos ciudadanos. El liderazgo, la empatía. No solo atenderemos a alumnos jóvenes sino a personas de todas las edades y creo que es un gran reto”, aseguró
“Las universidades, mediante el humanismo y la generación de ideas, crean esperanza. Debemos ser sensibles a los problemas, a las migraciones, a los retos medioambientales, problemas geopolíticos y problemas de salud. Debemos tener un impacto grande”, finalizó Castro.
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