Directora del Instituto de Ciencias del Bienestar y la Felicidad de Tecmilenio comparte cómo lograr un balance entre tu vida profesional y tu bienestar
Aspirar a la felicidad y a una vida plena, tanto en el ámbito profesional como en el personal, es un objetivo que cualquier docente debe tener.
Así lo considera la Dra. Rosalinda Ballesteros, directora del Instituto de Ciencias del Bienestar y la Felicidad de Tecmilenio.
Como parte de las jornadas de capacitación de la reciente Reunión Nacional de Profesores 2022 del Tec, buscando responder una pregunta muy común entre educadores: ¿puedo tener éxito como docente y ser feliz?
“A veces se nos olvida, pero cuando los profesores nos sentimos bien impactamos positivamente a nuestros estudiantes”, reflexionó durante su taller virtual.
El cómo te sientes impacta la vida de tus estudiantes
De acuerdo con Ballesteros, aspectos como la carga curricular, el entorno de enseñanza, la disposición de los estudiantes, son factores que pueden alterar la percepción que un maestro o maestra puede tener sobre su propia plenitud.
Además, según la experta, 40 años de investigación han logrado demostrar que la forma en la que los docentes se sienten tiene un impacto directo en el aprendizaje de sus estudiantes.
Para esto, se requiere un ajuste a las técnicas de manejo del salón a la par del bienestar psicológico de los profesores, balanceando su sensación de autoeficacia.
“Los consejos que les doy no son para trabajar más, sino para trabajar mejor”, recalcó la experta.
Bajo un enfoque de psicología positiva y modelos de bienestar, Ballesteros comparte 7 pasos clave para una docencia exitosa y una vida feliz.
1. Evalúa tu sentido de autoeficacia
“La autoeficacia es la capacidad que tenemos para lograr nuestras metas, es creer que nosotros podemos”, explica Ballesteros.
Para poder discernir el sentido propio de autoeficacia, sugiere examinar las actividades docentes, viendo qué tanto se alinean a los valores personales, las habilidades que se tienen y la apertura que hay a nuevas experiencias.
Añade que el sentido personal de autosuficiencia no es necesariamente lineal, ya que puede tener varianzas en periodos de estrés, como lo fue durante la pandemia.
2. Identifica tus fortalezas de carácter
De acuerdo con la experta, las fortalezas de carácter listadas por Martin Seligman y Christopher Peterson, son 24 rasgos positivos de personalidad universales agrupados bajo seis “virtudes”.
“Cada fortaleza tiene un valor, claro que hay que recordar que este modelo nos sirve sobre todo como un lenguaje común”, señaló la docente.
Para determinar nuestras fortalezas dominantes a partir de un reporte, Ballesteros sugirió realizar una prueba en línea, misma que es utilizada por los estudiantes en Tecmilenio.
3. ¿Ya identificaste tus fortalezas? Úsalas a tu favor
“Primero hay que entender nuestras fortalezas y luego utilizarlas para hacer cosas que no consideremos tan sencillas de hacer”, explica Ballesteros.
La experta aconseja en un inicio seleccionar aquella fortaleza que se considere como la más desarrollada y pensar en nuevas formas de ponerla en práctica.
De acuerdo con Ballesteros, este es un punto que se puede trasladar a los mismos estudiantes: enseñarles a lidiar con temas o materias retadoras con fortalezas como la gratitud, el humor, etc.
4. Conoce y explora tus áreas de oportunidad
“Este modelo sugiere que todos los humanos contamos con las 24 fortalezas en mayor o menor medida”, planteó Ballesteros.
Rosalinda aclara que si bien las primeras cinco a ocho fortalezas que salen en la prueba son la “huella insignia” de cada persona, el resto son fortalezas que existen como un área de oportunidad.
En este caso, se sugiere seleccionar la fortaleza menos utilizada y elaborar un plan concreto para llevarla a la práctica y mejorarla.
5. Buscar una sinergia de fortalezas interior y exterior
Para la profesora, saber cómo empatar las fortalezas existentes con uno mismo así como con otros permite que se cree un espacio de trabajo con sinergia.
“La sinergia se puede crear a partir de fortalezas similares, pero también mezclando ciertas fortalezas que se tienen con aquellas que no tenemos tan desarrolladas y otros sí”, argumentó.
Se recomienda pensar en una persona o situación que funcione muy bien y tratar de identificar la combinación de fortalezas que son las responsables de esa sinergia.
6. Aprende de quien piensa distinto
Si bien la sinergia es importante, el modelo que explica la experta muestra que las situaciones de conflicto también pueden ser oportunidades de crecimiento.
Para ello, se aconseja pensar en una persona con la que se tiene un conflicto, observarlo desde sus fortalezas y desde las propias y preguntarse: ¿cómo podría traer una fortaleza diferente a la acción?
“No es que uno tenga razón y el otro no, sino que se están viendo las cosas de manera distinta”, reflexiona Ballesteros.
7. ¡Cuídate del burnout!
Cuando Ballesteros habló del burnout, se refirió al desgaste acumulado que lleva al agotamiento, la sensación de estar fuera de control, la despersonalización y la reducción en la productividad.
“No puedo estar trabajando a mi máxima capacidad todo el tiempo, si todo el tiempo estoy operando a mi máxima capacidad intelectual o cognitiva estoy en más riesgo de caer en burn-out”, advirtió.
Incorporar periodos de recuperación a la rutina diaria y realizar actividades en el aula que nos revitalicen son formas que esta experta recomienda para evitar caer o hasta recuperarnos del burn-out.
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