En entrevista con CONECTA, Bruno Zepeda, rector de Tecmilenio, habla de los pilares que definen a esta universidad
Tecmilenio celebra dos décadas de historia, en las que ya ha logrado impactar a más de 140 mil egresados de sus programas.
Bruno Zepeda, rector de Tecmilenio, compartió hitos relevantes de la institución desde su surgimiento en 2002, los aprendizajes ante la pandemia y el camino a trazar para su futuro.
"Desde que nació la universidad hemos puesto énfasis en formar jóvenes dentro de un modelo que le brinde las competencias precisas que requieran para el trabajo", destaca Zepeda.
Además Tecmilenio es conocida ahora como la primera universidad positiva del mundo -designada así por Martin Seligman, pionero de la Psicología Positiva- por su enfoque en formar personas con propósito de vida.
Los inicios: educación en un nuevo milenio
La universidad fue fundada el 2 de septiembre de 2002, bajo el auspicio del Tecnológico de Monterrey (de ahí las primeras letras de su nombre).
Ante la llegada de un nuevo milenio (segunda parte de su nombre), se planteó crear esta institución “sin comprometer la calidad, pero siendo una opción de educación más accesible”, señala Zepeda.
Los primeros campus con los que inició Tecmilenio fueron Las Torres, San Nicolás, Monterrey Centro y Monterrey Sur, en Nuevo León, junto con el campus de Cuautitlán Izcalli en Estado de México y de manera virtual un Campus en Línea.
“Desde los inicios se apalancaron algunos aprendizajes del Tec de Monterrey como la educación remota, lo que nos ayudó a darle acceso a la gente.
“Siempre se ha ofrecido el modelo tradicional presencial, pero fue una innovación interesante el pensar en quienes casi siempre por la necesidad de trabajar no se podían dar el lujo de estudiar a tiempo completo y en un recinto designado”, describe Zepeda.
Desde esos primeros años para Tecmilenio fue crucial los acercamientos y alianzas con el sector laboral y el lograr que sus profesores tengan experiencia en organizaciones o la industria.
"Eso nos permitió diseñar un modelo de enseñanza basado en competencias y en fomentar la empleabilidad", resalta Zepeda, quien es rector de Tecmilenio desde mayo de 2020.
La elección de un diferenciador
Con el paso de los años Tecmilenio se planteó no sólo ayudar a sus estudiantes en reforzar sus competencias y la empleabilidad: se buscó también brindar competencias para la vida.
Fue en 2013 que creó el primer Instituto de Ciencias de la Felicidad en México.
“(El objetivo) es trabajar para que cada persona tenga su autoconocimiento, entienda mejor sus fortalezas de carácter, descubra su propósito de vida y se le de un modelo de acompañamiento para desarrollar las competencias que necesita.
“Es donde se empieza a hablar de una universidad más positiva, más enfocada al bienestar y al propósito de vida”, explica el directivo.
Uno de los cambios de este periodo incluye la creación del foro Wellbeing 360, que reúne a expertos en Ciencia del Bienestar en áreas como organizaciones, educación, ciudades y familias, entre otros.
Actualmente el instituto evolucionó para convertirse en el Instituto de Ciencias del Bienestar Integral de Tecmilenio, presidido por el doctor Tal Ben Shahar, profesor en psicología positiva y uno de los primeros en dar clases sobre el tema en Harvard.
"(Empezamos a ser) una universidad más positiva, más enfocada al bienestar y al propósito de vida"
Este espacio se enfoca en la promoción del bienestar mediante las enseñanzas de las bases para una vida plena, prácticas positivas para la felicidad de alumnos y colaboradores, investigación en bienestar y la difusión de resultados.
Dentro de la oferta educativa de Tecmilenio se incluyen cursos, certificados y posgrados en Psicología Positiva.
“No solamente es sobre tener un trabajo que te guste y sea bien remunerado. El éxito lo define uno mismo y con base en su propia definición de éxito tener competencias para la vida”.
A partir de ese momento Tecmilenio trabaja en la idea de que cada persona busque su propósito de vida y ofrece herramientas para llevarlo a cabo.
En 2017 el destacado psicólogo americano Martin Seligman, reconocido como uno de los líderes mundiales de la psicología positiva, nombró a Tecmilenio como la primera universidad positiva en el mundo.
Retos y oportunidades que trajo la pandemia
“Considero que un tercer gran momento disruptivo y punto de inflexión para Tecmilenio fue sin duda la pandemia y el confinamiento", reflexiona Zepeda.
“Hicimos una reflexión profunda sobre el futuro de la educación. La pandemia aceleró todo y nos permitió experimentar cosas que nos imaginamos a largo plazo”, agrega.
La educación a distancia que fue parte esencial durante la creación de Tecmilenio evolucionó a una educación en línea que actualmente se ha combinado con la presencialidad para dar paso a la hibridez y la flexibilidad.
“(La educación) ya no puede ser solamente para jóvenes que estudian 4 años para después trabajar 40 años en eso mismo; el conocimiento del mundo está cambiando rápidamente”, reconoce el directivo.
Zepeda menciona que durante esta época hubo algunos retos a los que se enfrentaron como el tema del acceso a la tecnología para continuar las clases en línea.
“Cada persona tenía un contexto diferente: teníamos estudiantes que quizá no tenían buena conectividad o un espacio privado para clases; entonces como primer reto nos aseguramos de que no se viera afectado el aprendizaje”, comenta.
Luego de campañas de donativos, apoyos financieros para alumnos, creación de laboratorios a distancia, y la promoción de la salud mental y el bienestar físico mediante redes de apoyos y mentores, convirtieron el reto en oportunidad.
Fortalecimiento en programas de educación para toda la vida
Tecmilenio evaluó el fortalecer sus programas de educación continua para no solo ofrecer maestrías, así que lanzó el Centro de Desarrollo de Competencias.
Este centro ofrece actualmente alrededor de 900 distintos certificados en áreas como negocios, liderazgo, bienestar, derecho, salud e idiomas entre otros.
Los cursos se realizan en modalidades presenciales, híbridas y en línea y van desde certificados hasta credenciales y micro credenciales.
“Toda la gente va a tener que actualizarse y adquirir nuevas competencias para mantenerse relevante.
“Tenemos un modelo que desde el principio se basó en competencias y ahora vamos a poner atención en el aprender de por vida y en las necesidades de las empresas”, enfatiza Zepeda.
Ahora en Tecmilenio hablan de "aprendedores", destaca el Rector, refiriéndose a aquellas personas de cualquier edad que aprenden continuamente.
El futuro de Tecmilenio
En noviembre de 2020 Bruno Zepeda presentó plan estratégico denominado CIMA 2025.
Esta visión, explica, se enfoca en la co-creación del contenido académico en conjunto con las empresas y empleadores, buscando el desarrollo de competencias necesarias para los estudiantes dentro del mercado laboral (de ahí viene la C de CIMA).
“En los primeros semestres se tienen más materias tradicionales con los fundamentos teóricos y académicos, pero a medida que avanzas empiezas a tener certificados selectivos.
“Esto te asegura que egresas con las competencias exactas y precisas que creamos con los empleadores para poder dar resultados desde el día 1”, menciona el directivo.
La I, dentro de CIMA, corresponde a la Integración, la cual menciona reúne el diseño pedagógico en los ecosistemas junto con las plataformas digitales, como los certificados, credenciales y micro credenciales en línea.
Estar en un momento en un salón de clase de manera presencial y al siguiente momento tener la posibilidad de estar en una clase en línea es otro ejemplo de esa integración.
La M corresponde a la personalización de las trayectorias de los alumnos al tener la posibilidad de que cada persona pueda estudiar a su ritmo, ofreciendo una educación modular y flexible.
“Lo que queremos es que la educación sea modular y apilable; por ejemplo quizá estudiar una credencial, luego otras y todo se va conectando”.
La A corresponde al acompañamiento, es decir, a quienes ayudan a filtrar el aprendizaje y a curar el contenido, entre los que se encuentran profesores, mentores y coaches.
“Lo más importante es que vayas buscando un propósito trascendente en tu vida, una misión de servir a la sociedad, ayudar a tu entorno y a otras personas a hacer un mejor país y una mejor sociedad”, apunta el Rector.
Así llega Tecmilenio a su segunda década
Tecmilenio tiene actualmente 30 campus en 25 estados de México; cuenta también con 8 campus Conect, que brinda espacios físicos y virtuales, para una educación híbrida.
Su oferta educativa abarca preparatoria, licenciaturas e ingenierías en modalidad presencial, carreras ejecutivas, carreras en línea, maestrías presenciales e híbridas, másters en modalidad hibrida, así como especialidades en línea y presenciales.
A través de su Centro de Desarrollo de Competencias ofrecen cursos, certificaciones, credenciales y microcredenciales en áreas de conocimiento como negocios, liderazgo, bienestar, derecho, tencologías de la información, entre otras.
Su Instituto de Ciencias del Bienestar Integral realizó el lanzamiento de su plataforma Wellbeing360tv con contenido gratuito como podcasts y conferencias, alrededor de los ejes: Ciudades Positivas, Educación Positiva, Vida con Proposito, Organizaciones Positivas y Familias Positivas.
Los campus Culiacán, Guadalajara, Las Torres, Villahermosa y Ferrería operan bajo el modelo de Parque Tecnológico Educativo en asociación con diferentes empresas como Softtek, IBM, India Infosys, entre otras.
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