Con información de Miranda Saucedo
Perder el miedo a ser lo que ustedes quieran definirá su camino como profesionistas y las ayudará a dar un salto en la equidad de género, coincidieron expertas.
Datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación (UNESCO) solo el 33% de los investigadores en el mundo son mujeres, haciendo de este campo uno de los más retadores en materia de igualdad.
“Cuando tomé la decisión de estudiar astrofísica la tomé porque dije yo quiero estudiar algo retador.
“Para mí el simple hecho de estudiar ya era grande, entonces dije voy a estudiar astronomía, el universo así acabé estudiando astrofísica”, compartió Carolina Rodríguez, quien realizó una maestría y doctorado en el Instituto de Radioastronomía y Astrofísica (UNAM).
La también profesora del campus Monterrey fue parte del panel Coffee Chat en conjunto con las científicas e investigadoras Grissel Trujillo, Luz María Alonso y Marilena Antunes-Ricardo.
Este panel, iniciativa del grupo estudiantil Girl Up del Tec, se llevó a cabo el pasado miércoles 17 de marzo a las 18:00 horas.
Entre los temas que discutieron se encontró el de la paridad de género en los puestos de trabajo dentro del área científica.
Al que las especialistas se refirieron como una oportunidad para fomentar el esfuerzo de las mujeres para alcanzar puestos de liderazgo.
“En el área de ingenierías aplicadas a medicina y biología es la misma proporción aproximadamente que en hombres.
“Lo que sí falta es más mujeres en liderazgo, mujeres en los puestos de toma de decisiones, ya que se ha demostrado que las mayores fugas de talento se dan cuando las mujeres están en su formación”, detalló Grissel Trujillo.
A la mujer siempre se le inculca de alguna manera el seleccionar una carrera que sea cómoda para tener familia, añadió Marilena Antunes.
La profesora es reconocida por su trabajo en microbiología y otras áreas teniendo publicados más de 30 artículos científicos.
“Estos porcentajes tan bajos de mujeres en la ciencia también se alinea a que queremos ser exitosas en muchos aspectos de nuestra vida.
“Hay muchas carreras en el área de STEM que pueden ser demandantes de tiempo, sobre todo en cargos gerenciales, equilibrar la parte personal con el profesional pienso que es un factor que suele impactar en esta falta de liderazgos femeninos”, reconoció.
Algo que se puede hacer para ir rompiendo con esta brecha, aseguró Luz María Alonso, es lo que ha implementado el CONACyT, que al momento de presentar un proyecto se evalúa cómo está constituido el equipo de trabajo.
“Conocer quiénes van a trabajar en el proyecto trata de alguna manera de tener la estadística de que sí ese proyecto se va a llevar a cabo de manera multidisciplinaria y con equidad de género.
“Creo que todas esas partes de confiar en nosotras mismas, es algo que podemos hacer para reducir esa brecha” destacó.
Por su parte Grissel Trujillo comentó que mucho de las acciones que se han ido haciendo tienen relación con lo que cada mujer aporta desde su propio entorno.
“A mí me gusta pensar, muy adhoc a lo que hago en investigación, que somos como un tejido social, y como células individuales pareciera que estamos segregadas.
“Pero sí podemos tener un efecto sistémico si hacemos bien lo que tenemos que hacer desde la posición en la que estamos”, señaló.
Finalmente, Carolina Rodríguez afirmó que como mujeres científicas también tienen la responsabilidad de ser un modelo para seguir y de esta manera inspirar a más niñas y jóvenes.
“Nosotras como profesoras, como científicas debemos crear espacios donde las alumnas se puedan sentir identificadas.
“Y donde sepan que hay alguien con quien pueden acercarse para resolver estas inquietudes, es algo que a mí me hubiera gustado tener cuando era joven”, concluyó.
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