*Luz María Sierra Siller | Opinión | Profesora de la Escuela de Humanidades y Educación
Alguna vez viendo una película ¿has sentido ganas de llorar?, al escuchar una melodía ¿te han dado ganas de bailar? o cuando has asistido a una obra teatral ¿te has conmovido con la historia representada? Si la respuesta es sí, pues has experimentando lo que genera el Arte.
Existe una relación profunda entre el Arte y las emociones. Las personas somos seres emocionales, capaces de sentir y experimentar los sentimientos que evoca una expresión artística. Al enfrentarnos a la obra de arte nuestros sentidos se conectan con ella y la relacionamos con nuestras vivencias pasadas y presentes.
Las manifestaciones artísticas como la música, la pintura, la literatura, la danza, el teatro, la arquitectura y la escultura crean esa magia que mueve al ser humano a sacar su sentir de lo más profundo de su alma. Se dice que el cuerpo reacciona ante dichas manifestaciones artísticas y genera emociones y sentimientos.
Melancolía, gozo, júbilo, alegría, compasión, esperanza, sorpresa se ponen en marcha ante la obra artística, se vive en el aquí y el ahora. Cada vez que vuelves a leer la misma obra literaria se experimenta un sentimiento diferente, entonces decimos que la obra nos da lecturas diversas, por lo tanto genera emociones distintas.
El Arte activa la creatividad del espectador, ya que despierta los sentidos, hace ver la realidad de manera nueva y lo desliga de lo cotidiano.
Lo mismo sucede con la música, cuando escuchas una melodía vives una experiencia que te remonta a cualquier universo, ya no hay barrera cultural, sentimientos y emociones se conjugan en una pieza musical.
En la película británica Billy Elliot (2000), el personaje del mismo nombre describe lo que experimenta al bailar cuando se le pregunta ¿qué sientes cuando bailas? “cuando empiezo a bailar lo olvido todo, todo desaparece y siento un cambio en mi cuerpo como si tuviera fuego dentro y me veo volando como un pájaro, siento electricidad.”
Ramón Gener, músico, humanista, escritor y divulgador musical, en su programa de televisión This is art (2017) nos dice “…el Arte está ahí para que nosotros aprendamos a conocernos mejor… el Arte tiene muchos niveles de comprensión y el primero es el arte de emocionarnos… A través de las emociones descubrimos lo que el Arte nos está diciendo, está al alcance de todo el mundo.”
Los espectadores frente a la obra de arte reconocen lo que sienten, se dan cuenta de lo que viven, experimentan y se hacen conscientes de su realidad.
Es precisamente disfrutar del cine, del teatro, de la música, de la literatura, lo que nos moverá a generar sentimientos liberadores, creadores y reconstructivos.
Ante tantas tensiones emocionales negativas en el mundo, podemos recurrir siempre a la acción rescatadora de una obra de arte y de lo que nos evoca.
*La autora es maestra en Letras Españolas, profesora del Departamento de Lenguas Región Monterrey del Tec de Monterrey colaboradora del Centro de Escritura del campus Monterrey.
Twitter: @lsierra_3
SEGURAMENTE QUERRÁS LEER TAMBIÉN: