Estos consejos de la directora del programa Licenciatura en Letras Hispánicas del campus Monterrey harán que la elaboración de tus calaveritas sea más sencilla
Si para este Día de Muertos buscas hacer calaveritas literarias existe un proceso que puede ayudarte con ello.
Una calaverita es un poema narrativo que se escribe como homenaje lúdico, dijo Xitlally Rivero, directora del programa Licenciatura en Letras Hispánicas del campus Monterrey.
Durante el Taller de Calaveras, realizado en Zoom por el Centro de Escritura, la doctora compartió 7 consejos para redactar el texto:
1.- Conceptualiza qué es una calavera
Las calaveritas, comentó la docente, deben de tener una anécdota con inicio, desarrollo y desenlace.
“Una calaverita está escrita en estrofas de 4 cuatro líneas. La anécdota involucra a la muerte como personaje e interactúa con la persona a quien escribimos”, señaló.
2.- Haz una lista de sinónimos
Tener al alcance sinónimos y palabras relacionadas con la muerte, como catrina, parca, flaca, tilica, huesos, panteón, flores, entre otros, facilita la creación de calaveritas.
“Mientras más a la mano tengas sinónimos y campos semánticos más fácilmente vas a escribir”, sugirió.
“Una calaverita está escrita en estrofas de 4 cuatro líneas. La anécdota involucra a la muerte como personaje e interactúa con la persona a quien escribimos”.
3.- Identifica al personaje
Reconocer al personaje que se va a homenajear y enlistar elementos que lo caracterizan es otro recurso para desarrollar calaveritas.
“Hay que pensar qué suele hacer o distingue a nuestro personaje; dónde suele estar, qué lo diferencia de otras personas. También sus características físicas o psicológicas”, dijo.
4.- Sitúa en Día de Muertos
Otro de los pasos para crear una calaverita es pensar en una situación alusiva al Día de Muertos o a la muerte.
“Se debe pensar en una anécdota donde el personaje protagonista se vincule con la muerte. Idealmente, esta anécdota debe resultar graciosa al lector.
“Si en la anécdota aparece la muerte piensa cómo interactúa con esa persona; qué pasaría si se encontrara con la muerte”, señaló.
5.- Pierde el miedo a escribir
Otras de las recomendaciones que brindó la profesora fue perder el miedo a escribir, hacer uso del lenguaje coloquial y volver a verificar el escrito.
“Creemos que se necesita inspiración, que salga el texto de una sola vez y que la primera versión quede perfecta, pero no. Escribir en cualquier contexto siempre es reescribir.
“En cualquier proceso de escritura hay que darnos la libertad de usar el lenguaje coloquial en esos primeros borradores. La escritura literaria también puede ser divertida”, comentó.
6.- Cuida la rima
Procurar que los versos rimen y tengan la misma extensión es otra herramienta práctica para el desarrollo de calaveritas literarias.
“Hay que verificar que haya un mismo patrón de la rima; eso ayuda al ritmo que deseamos en los textos líricos. Esto se logra con un patrón estable. Puede ser ABBA, ABAB o AABB.
“Esto quiere decir que el 1er verso tiene que rimar con el 4to, y el 2do con el 3ero, o que el 1ero rime con el 3ero y el 2do con el 4to. Se vale variar”, recomendó.
La profesora agregó que también existen dos tipos de rima en las que coinciden la vocal y consonante o solo las vocales.
7.- Verifica reglas de métrica
Cuidar que todos los versos tengan el mismo número de sílabas, que pueden ser entre 8 o 10, es el último de los pasos para hacer el poema narrativo.
“La métrica más común es de ocho sílabas, pero también puedes escribir versos de 7 u 11 sílabas. Lo importante es que sean de la misma extensión”, planteó.
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