Son cinco semanas de inmersión en un Pueblo Mágico creando proyectos para el gobierno municipal y empresas vitivinícolas mientras se disfruta de recorridos turísticos y el patrimonio de la ciudad.
Así fue el primer verano Tecnología y Negocios Inteligentes realizado por el Tecnológico de Monterrey campus Laguna con sede en Parras de la Fuente, Coahuila; pueblo con más de 400 años de historia e ícono de la industria vinícola de México.
“Nos llevamos un crecimiento grandísimo tanto en lo académico como en lo personal”, así lo expresó Daniel Iván Benítez Porras, estudiante de Negocios Internacionales en campus Ciudad de México, quien fue parte de este reto.
Y es que, junto a Daniel, 21 jóvenes de los campus Santa Fe, Ciudad de México, Querétaro, Monterrey, San Luis Potosí y Laguna; impulsaron a Parras a través de una experiencia académica que les permitió realizar proyectos para el crecimiento del turismo y enoturismo.
“Hemos estado trabajando en proyectos de turismo incluyente y para salvar el patrimonio de Parras que tiene gran historia para contar”, expresó Daniel, quien aseguró que el ayuntamiento “nos ha abierto las puertas”.
El pueblo mágico, el aula de este verano
Los alumnos participantes llevaron las materias Patrimonio Cultural de México, Innovación y procesos creativos y Ciudadanía y ciudades inteligentes + Inmersión Social; mientras que otro grupo realizó estancias profesionales en Vinícola Parvada.
“Sabíamos que iba a ser una gran oportunidad tanto para nosotros como para el campus”, afirmó Jacqueline Giacoman Arratia, directora de la Escuela de Humanidades, Arquitectura y Ciencias Sociales de campus Laguna.
“La sorpresa fue grande, una ciudad que nos recibió con las puertas abiertas y con grandes retos, con un futuro prometedor en donde el enoturismo y turismo de experiencia va a marcar parte importante del desarrollo de la ciudad”, agregó.
Los profesores Ana Olga Rodríguez Betancourt, Jacqueline Giacoman Arratia, Ana Catalina Argüelles Del Bosque, Juan Antonio Camacho Ayala, María Antonieta Aguilera Núñez, Jesús González Encina y César Delfino Nevárez Leal, fueron quienes acompañaron a los alumnos.
“Los profesores estuvieron totalmente involucrados en el proyecto, vivir los casos reales fue toda una experiencia para ellos”, reveló Jacqueline Giacomán, quien dijo que el salón de clases se trasladó a oficinas de gobierno, bodegas, viñedos, museos y el mismo pueblo mágico.
“Eso es el Tec21, un modelo flexible donde el aprendizaje no es solamente en las aulas y a través de clases impartidas normalmente, el aprendizaje es al día y acabando las clases es ir a vivir la ciudad, agregar más cosas al proyecto”.
Proyectos de valor para socios formadores
Los 22 alumnos del Tec no estuvieron solos durante estas cinco semanas, ellos estuvieron acompañados por los socios formadores Parvada, Nikaui.parras, la Asociación de Vitivinicultores Artesanales del Valle de Parras y el Ayuntamiento de Parras.
Para el Ayuntamiento de Parras los estudiantes realizaron proyectos de turismo incluyente que beneficien también a los habitantes del municipio tras el despunte del Pueblo Mágico.
Algunas de las propuestas fueron una ruta histórica digital, la capacitación de los pequeños historiadores del Santo Madero, y retomar la venta de vinos caseros tradicionales, entre otros.
“Lo que más me ha gustado son las relaciones profesionales con la enóloga y los socios formadores de Parvada”.
El alcalde de la ciudad, Fernando Orozco Lara, quien recibió los proyectos creados por los alumnos del Tec en el Teatro Juárez, recinto de la ciudad, destacó el trabajo realizado por el equipo del Verano Parras 2022.
“Son jóvenes talentosos que están dejando una huella y un legado en este municipio, gracias por poner en alto este verano, por nuestra parte siempre los vamos a apoyar, proteger y siempre estaremos orgullosos de estos 22 valientes que le apostaron a Parras”.
Para el viñedo, productor de vino, fábrica de quesos y desarrollo inmobiliario Parvada, estudiantes de ingeniería y licenciatura realizaron una estancia profesional.
De esta experiencia académica derivaron proyectos de mejora en las experiencias de cata y certificaciones, así como estrategias de marketing digital y comercio electrónico.
René Francisco Hamdan Calderón, socio de Parvada, resaltó la misión de los estudiantes del Tec en la empresa y el valor de sus aportaciones.
“Es muy gratificante, el ver desde otro punto de vista lo que un estudiante ve a diferencia de un empreesario es algo muy enriquecedor. Ellos nos llegan a aportar para tener una mejora continua”, comentó.
Primer verano en Parras
El director general de campus Laguna, Eduardo Javier Arrambide Leal, agradeció a los alumnos que apostaron por este primer verano con sede en Parras de la Fuente, Coahuila.
“Quiero agradecerles por haber levantado la mano para hacer verano y salir de casa. Espero que hayan aprendido y se hayan divertido mucho. Parras es un Pueblo Mágico único, e increíble”, afirmó.
Los alumnos que dieron inicio a este Verano Parras de campus Laguna fueron: Mónica González, Edgar Manuel De León, Paola Espinosa, María Fernanda Castañeda, Juan Carlos Reséndiz, Fátima Scarlet Herrera y Daniel Iván Benítez.
Así como Gonzálo Ávila, David Esteban González, Edgar Octavio Jiménez, Omar Zambrano, Andrea Guzmán, Helen Samantha Rodríguez, Guadalupe Julián Arámburo, Natalia Celeste Guerrero y Luis Patricio Silerio.
Además de María Andrea Rodríguez, Liliana González, José Juan Vargas, Dante Ferreyra, Marcela de la Peña y Humberto Pérez.
José Juan Vargas, estudiante de Ingeniería en Biotecnología de campus Monterrey, quien realizó su estancia en Parvada, destacó el aprendizaje académico que se lleva de este socio formador.
“Fue aprender sobre las certificaciones ISO y su importancia en las áreas de calidad y de servicio, además de todo lo referente a la vendimia y la elaboración del vino. Hemos aprendido mucho de la enóloga”, finalizó.
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