Daniela Rubio | Campus Chihuahua
Un profesor que deja huella es aquel que trasciende en la vida de los alumnos de manera integral; es aquel que no solo será recordado por el dominio y conocimientos de su materia, por su capacidad para enseñar y la paciencia que tiene con los alumnos, porque no solo enseñaba física, matemáticas, sino que enseña a los alumnos a vivir.
Tal es el caso del Diego Grañena Puyó, actual director de la División Académica de Humanidades, Ciencias Sociales y Arquitectura en el Tec de Monterrey campus Chihuahua.
Diego, además de ser el director de esta división, también da clases de inglés y de cine a los y las estudiantes del campus, la ideología de su trabajo y forma de ser está enfocada en el sentido humano y defender las causas de los sectores más necesitados de la sociedad.
Previo a formar parte del Sistema Tec, el profesor tuvo una larga trayectoria en la enseñanza.
Comenzó dando clases de inglés empresarial en Zaragoza, España, su ciudad de origen, en el año 2000, posterior a esto, se trasladó hasta Chicago, Illinois, dónde impartió clases de inglés y español a estudiantes de primaria, en las escuelas Brennemann School, Ray School y Blaine School.
“La experiencia más gratificante es que por medio de la educación he podido conocer culturas diferentes a la mía, ser profesor me ha permitido conocer la cultura británica, estadounidense y la mexicana. Ese orgullo que me da la educación y por medio de ella conocer una cultura diferente, eso no te lo ofrece otra profesión".
Por sus capacidades, habilidades y pasión, el Tec de Monterrey lo invitó a formar parte del sistema educativo en el 2008 y fue entonces cuando comenzó a transformar la vida de los estudiantes del Tec.
Pasó de ser profesor de inglés en Prepa Tec, a director de generación de la misma, director del departamento de idiomas, a su cargo actual.
“En este momento me siento muy contento, no me gustaría echar un vistazo al pasado. Todo lo que he hecho en cuanto a educación me ha gustado, pese a que yo no quería ser profesor en un principio, la vida me llevó a ello, y gracias a Dios que me llevó a ello,” dijo Diego.
Más su pasión no ha sido lo único que lo ha llevado a donde está ahora, su preparación y constante actualización en temas de pedagogía son factores primordiales en el impacto que ha tenido Diego en su trayectoria.
Cuenta con 28 certificados, cuatro diplomas, cuatro cursos en educación, literatura, liderazgo, emprendimiento, idioma inglés, ética, cine y cultura, un diplomado en estudios de inglés, dos licenciaturas en Filología Inglesa y en Estudios del Inglés, y dos maestrías de Aptitud Pedagógica y en Ciencias de la Información.
Aparte de su enorme preparación, el maestro Diego Grañena, también tiene un gran camino recorrido en preparar a los demás docentes y estudiantes.
Ha dado conferencias, creado programas educativos a nivel nacional para el Tec en México y ha diseñado talleres para la Semana I: Customer Service English and American Literature, La Filosofía de David Bowie, Dadaísmo y Surrealismo en el Cine.
Asimismo, Diego recalcó de la importancia de tener un crecimiento personal en lo holístico. “Yo siempre me burlo del small talk. Hablar del tiempo es ridículo, en vez de decirme “está nublado” por qué mejor no me dices “¿cuál es la textura de las nubes?” o “el día de hoy me recuerda a aquel libro de Hemingway”. No lo sé, cosas más sustanciosas. El hecho de conocer de música, de arte, de cultura, de vinos, eso te puede llevar a otros contextos y elevar tu nivel.”
Como menciona el profesor, el ampliarse en conocimientos y experiencias puede ser ese “factor X” que te distinga del resto.
Tal es su caso, que es fanático de la música, en especial del rock. “Para mí, la música me ha abierto muchísimas puertas y es algo que nunca voy a abandonar, me encanta tocar la guitarra, me encanta conocer nuevos estilos, nuevos estilos del pasado. No me da la vida abasto para escuchar todos los discos que quiero conocer y libros que quiero leer, y de eso se trata la vida, de ir cultivándote.”
De igual manera, Diego disfruta mucho de cocinar, “Me encanta cocinar cuando tengo los ingredientes a mano, puedo prepararte desde un pollo tandoori a comida jamaicana con jerk o migas al pastor o comida italiana. También me encanta conocer diferentes vinos”.
Diego tiene un sinfín de gustos y pasiones, pero sin duda, su mayo pasión es la educación. “Yo siempre me consideraré profesor, es lo que más satisfacción me da en la vida, pensar que de alguna forma contribuyo con un granito de arena, pensar que, gracias a esta profesión, que lo único que da son bendiciones, pues estamos generando personas que están contribuyendo para una mejor sociedad.”
Preparado, paciente y entusiasta son algunas de las palabras que mejor describen a Diego Grañena, quién además de todo esto es conocido como uno de los profesores que siempre tendrán la puerta abierta para recibirte. Sea por lo académico o por lo personal, Diego es uno de esos profesores de Campus Chihuahua que dejan huella.