A principios de enero del 2020, el Tec de Monterrey a nivel nacional, tendrá la primera edición de un nuevo período para cursos intensivos de invierno.
Y campus Chiapas, también se está preparando para impartir este curso refiriéndose a él como Invierno i.
La vocación del campus Chiapas, se caracteriza por tener un enfoque en innovación social, es por ello que en el 2018 se creó el Centro Internacional para la Innovación Social.
Este centro, ubicado en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, es un espacio para la investigación, generación y validación de soluciones innovadoras a problemáticas sociales.
El cual, será el lugar en donde se desarrollarán las clases, actividades y retos que los alumnos vivirán durante 5 semanas que tendrá de duración este curso.
“La participación en los periodos intensivos se ha visto enriquecida por la convivencia de alumnos nacionales e internacionales, este primer invierno i no será la excepción”.
Así explica Martha Velázquez Díaz, directora del Centro Internacional para la Innovación Social del Tec campus Chiapas, que espera aproximadamente la llegada de 100 alumnos.
Las materias que se están ofertando dependerán del modelo educativo al que el alumno pertenezca, siendo estas las siguientes:
Materias del Modelo Educativo Tec21
- H1057 - Los mitos que nos habitan: de Prometeo a Marvel.
Materias del plan anterior:
- EM1006 – Desarrollo de empresas con impacto social.
- H2004 – Ciudadanía: práctica política y social.
- H2002 – Ética, profesión y ciudadanía.
- AR95010 – Proyecto internacional de arquitectura.
- D1016 – Seminario de juicios orales (Tópico para LED, LDP y LDF).
¿Qué aporta este curso?
A través del aprendizaje vivencial y experiencial, los alumnos adquieren conocimientos que aplican a situaciones complejas de la vida real.
“La convivencia cercana con las comunidades indígenas brinda experiencias memorables que confrontan su realidad y su persona”, comenta Martha Velázquez.
Desde este contraste, fortalecen sus competencias éticas y ciudadanas, al entender un entorno complejo, solidarizarse con los otros y ser empáticos ante las necesidades.
También, al valorar y dar sentido a otras formas de encontrar la felicidad; desarrollando así, el sentido humano y contribuir al florecimiento de las poblaciones marginadas y vulnerables.
“La convivencia cercana con las comunidades indígenas brinda experiencias memorables que confrontan su realidad y su persona”.
¿Qué beneficios se obtienen?
“Además de cursar una materia de su plan de estudios, el alumno acredita 200 horas de servicio social”, comenta la directora.
De manera opcional, el alumno podrá optimizar su experiencia con workshops relacionados en innovación social y a actividades holísticas que contribuirán a su formación en todas las dimensiones del ser humano.
Entenderá las problemáticas y necesidades sociales, valorará la diversidad y la riqueza que aporta la cosmovisión de los pueblos originarios.
Esto permitirá contribuir en la generación de soluciones de alto impacto que beneficie una sociedad vulnerable.
“Te hará crecer como persona y como futuro profesionista, serás consciente de la importancia de alcanzar un desarrollo armonioso en todas las áreas de tu vida”, reitera Velázquez.
La directora, concluye invitando a los alumnos a que se atrevan a vivir esta experiencia retadora en el transcurso de su formación profesional.
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