Alumnos del Tec apoyan a la Fundación Unidos por el Autismo

Katya Ávalos | Ciudad Juárez

Apoyar a la comunidad es un aspecto muy importante para los profesores, colaboradores y estudiantes del Tec de Monterrey, y es por esta razón que se unen los alumnos para participar en actividades organizadas por la Fundación Unidos por el Autismo.

Este evento fue el Segundo Torneo de Boliche organizado por “Unidos por el Autismo”, conformado por cuatro equipos integrados por alumnos del Tec y jóvenes con el trastorno del espectro autista (TEA), en donde además de pasar momentos agradables, les ayudó a conocer las reglas del juego, los límites de cada juego y respetar su turno.

“Me parecen muy bonitos este tipo de eventos porque mi hijo se ha integrado bastante, ha socializado y ha aprendido a seguir las reglas de cada juego”, comentó Carmela Martínez, madre de Gerardo Flores, joven autista.

Es en la clase de Ciudadanía y Democracia, impartida por la profesora María Mercado, en donde se busca fomentar en los alumnos la empatía y respeto a través de un proyecto en el que ellos tienen que desarrollar estrategias de inclusión de personas con el trastorno del espectro autista en la sociedad.

“Es el primer año que mi hijo y yo participamos en las actividades de la fundación, y espero que con esto se anime a convivir más con otras personas para que vean que sí pueden integrarse”, expresó Fabiola Prado, madre de un joven de 15 años con este padecimiento. La directora de la fundación es Egla Ramírez, quien tiene un hijo con este padecimiento, y tuvo la idea de crearla al ver la necesidad de las personas con autismo en el estado de Chihuahua, ya que en Ciudad Juárez no existe ningún centro de atención especializado solamente para personas con el trastorno del espectro autista y el principal objetivo de la asociación es hacer el primer centro de autismo en la ciudad.

Esta asociación se inauguró el 2 de abril de 2014, Día Mundial del Autismo, en el que se realizan caminatas apoyando la causa.

Como preparación para este evento, los alumnos tuvieron una sesión informativa de lo que trata la organización, impartida por Egla Ramírez, después tuvieron una sesión sobre cómo interactuar con las personas con el trastorno del espectro autista, luego tuvieron una kermés, y por último, se hizo una invitación a las familias que forman parte de la fundación para que visitaran el Tec, donde convivieron con los estudiantes y además tuvieron un espacio en la cocina donde ellos cocinaron hamburguesas.

“Al convivir con los muchachos que tienen el trastorno del espectro autista, aprendí que ellos son chavos como nosotros, que incluso son mucho mejores que nosotros en sus actividades”, comentó David Medina, estudiante de ingeniería mecatrónica.

Al finalizar el evento se hizo entrega de unos 'bolos' decorados, en donde todos los miembros de cada equipo se firmaron para que permaneciera de recuerdo en cada uno de ellos ese día tan especial.

Los jóvenes y los estudiantes se fueron felices al haber vivido una experiencia de este tipo, y esperando tener la oportunidad de seguir apoyando a la fundación.