Jimena Bustamante del campus Ciudad de México, relata cómo su pasión por el baile la llevó a presentarse en el festival Pa'l Norte
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Desde los 10 años, Jimena Bustamante comenzó a acercarse a la gimnasia, fue aquí que descubrió su amor por el baile, algo que rápidamente dejó de ser un simple pasatiempo para convertirse en futuro.
“Cuando practicaba gimnasia, sabía que quería ser gimnasta olímpica. Cuando empecé a bailar, yo nunca lo vi como una actividad extra de la escuela. Yo me dije: ‘quiero ser bailarina’”, comenta Jimena.
Este deseo de dedicarse al baile nunca la abandonó, y cuando fue el momento de terminar la preparatoria, sus padres le aconsejaron seguir una carrera universitaria.
Jimena decidió entonces continuar con su pasión por la danza y estudiar en la Escuela de Negocios del Tec de Monterrey en campus Ciudad de México, donde forma parte de la Compañía de Danza Actual.
Poco a poco su dedicación como bailarina la ha llevado de participar en escenarios de la ciudad, hasta tocar recintos como el Estadio BBVA en Monterrey con motivo del 80 aniversario del Tec y más recientemente estar presente durante la 9a edición del festival musical Pa’l Norte en Nuevo León, Monterrey.
Del 29 al 31 de marzo, la estudiante tuvo la oportunidad de presentarse en Parque Fundidora y compartir escenario con la artista mexicana Danna, con quien ha estado de gira en distintas partes de México y Latinoamérica.
La bailarina comparte a CONECTA su viaje de cómo ha sido balancear su vida profesional con sus estudios y su profesionalización en el mundo artístico.
Gestionar la universidad con tu trabajo
De primera impresión, Jimena pensaba que su licenciatura era poco compatible con su carrera artística; sin embargo, conforme a más castings acudía más cambiaba su parecer.
“El pensar en mi carrera dancística desde una perspectiva de negocios me ha ayudado a comprender qué es lo que yo tengo, que mi competencia no. Suelo estudiar el mercado y trato de mejorar mis posibilidades con eso en mente”, añade.
“Mi perspectiva de negocios me ha ayudado a comprender qué es lo que yo tengo, que mi competencia no”.
Asimismo, agradece al Tec y sobre todo a la Compañía de Danza Actual, gracias a la cual está becada y al director de la Compañía por las oportunidades y contactos profesionales que la han brindado.
“Cuando yo tenía el dilema de si estudiar una carrera o irme a estudiar Danza al extranjero, él me decía, ‘no te preocupes, hay muchas otras formas de llegar a ser bailarina profesional’. Sé que puedes lograrlo”.
Jimena señala sentirse particularmente agradecida por los constantes concursos en las que la involucran, tales como el TDR Dance Convention y también aprecia la posibilidad de contar con un espacio de trabajo en donde se siente motivada y querida.
La experiencia de bailar junto a Danna
El trayecto para bailar junto con la cantante pop desde un inicio fue desafiante, pues en el propio casting, en donde participaron más de 500 participantes, duró más de 7 horas y solo quedaron seleccionados 5 hombres y 5 mujeres.
“Desde las 9 de la mañana van haciendo filtros, de los cuales, los primeros son individuales y el último un baile en pareja. Terminamos como a las 7 de la noche entre filtros y filtros”, comenta.
Una vez que fue seleccionada, Jimena comparte que las exigencias cada vez escalaban en dificultad, pues el show no solo demandaba destreza física, sino que también habilidad para adaptarse a la energía, tanto del resto de los bailarines como a la de Danna.
“Tienes que estar muy concentrada y cuidarla mucho a ella. O sea, si ella se equivoca, tú tienes que hacer como que no pasó nada y acoplarte a lo que ella haga”.
A pesar de estas dificultades, ella comparte que aún no termina de dimensionar el gran número de personas que conocieron su trabajo y añade que es una experiencia que definitivamente le gustaría repetir.
Cómo construir una carrera artística
Si bien, el Tec definitivamente ha impulsado su carrera como bailarina, señala que sus mejores oportunidades, tales como poder bailar junto con Danna, han venido principalmente de buscarlas fuera del aula y hacer contactos.
“Al ver mi trabajo en un show sobre la película de Disney, Coco, nuestra capitana de danza, nos mandó la convocatoria para bailar junto a Danna en el Pa’l Norte.
“Al momento de llegar a las audiciones descubrí que ya había trabajado con los productores del show de Danna”, explica.
Jimena atribuye el hecho de poder trabajar con coreógrafos y bailarines que admiraba a tener siempre una actitud proactiva y confianza en ella misma.
“Nada es imposible, siempre y cuando le invirtamos el tiempo y empeño, se puede llegar a donde deseamos”.
En términos de su trayectoria como bailarina, Jimena señala que, antes de tomar todas las clases de danza, a ella le ha funcionado más medir su talento en castings y concursos.
En estos, ella comenta no solo haber aprendido a recibir críticas tanto positivas como negativas, sino que también le ha ayudado a construir su estilo y reconocer el de otras personas.
“Algo que aprendí de las audiciones es que, aunque todos sigamos una misma coreografía, cada uno la aborda de forma única. Puedes ver en sus movimientos no solo su formación, sino que también su historia de vida”, explica.
Finalmente, Jimena cierra compartiendo a CONECTA la siguiente reflexión:
“Nada es imposible, siempre y cuando le invirtamos el suficiente tiempo y empeño a lo que nos propongamos, se puede llegar a donde deseamos”.
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