El aumento de estados de la República Mexicana considerados con sequía extrema y severa han puesto al tema de sequía en México dentro de las conversaciones más recurrentes en nuestro país.
Según Paola Vilchis, maestra en Ciencias Ambientales y Carlos Pérez, doctor en Conservación Ambiental, docentes en el Tecnológico de Monterrey campus Toluca, las sequías son naturales, pero lo que vivimos no.
“Las sequías son procesos naturales cíclicos. En México las lluvias van de mayo a octubre y la sequía, de diciembre a abril. Naturalmente, la sequía ayuda a propagar el polen y las semillas que florecen durante las lluvias”, dijo Carlos.
Sin embargo, la actividad humana ha interrumpido este ciclo con actividades como la deforestación con fines agrícolas.
Cuáles son las causas de la sequía en México
De acuerdo con el profesor Pérez, esto dificulta la evaporación, precipitación y escurrimiento del agua, y si añadimos el sobre consumo humano, es una receta para el desastre.
Ademas, indicó que “Consumimos más agua que la que el ciclo es capaz de recuperar. Nuestra actividad impide que se regeneren los mantos acuíferos, que no se evapore y no llueva tanto como debería”.
Según datos de 2021, la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) por sus siglas en inglés, consideraba que la situación de sequía en México era la más fuerte desde 2011.
Las sequías son procesos naturales cíclicos.- Carlos Pérez
En 2022, La Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) declaró el inicio de emergencia por sequía en México y comparte a través del Monitor de Sequía en México (MSM) los un mapa que muestra la situación en nuestro país.
Algunos estados catalogados con sequía extrema y severa son: Baja California Norte, Baja California Sur, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Guanajuato, Sonora y Sinaloa.
Por lo anterior, CONAGUA publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el “Acuerdo de inicio de emergencia por ocurrencia de sequía severa, extrema o excepcional en cuencas para el año 2022”.
Una situación diferenciada de acuerdo con cada región
De acuerdo con el doctor Pérez, la sequía en el norte de México tiene una relación con la historia productiva de la zona, la cual se intensifica en función del tiempo.
Explica que, por un lado, influye la sobre explotación del agua por las Industrias de la carne, leche, vino, cerveza, semillas, a través de sistemas poco sostenibles y el otorgamiento de concesiones irregulares a empresas e industrias.
Con respecto a este último, señala que "se ha pronosticado que para el 2050 el 70% de la población mundial vivirá dentro de urbes, lo cual, puede desencadenar problemas de una mala gestión del agua.
"En muchos casos, las ciudades no están preparadas para albergar esta constante migración, lo que promueve desigualdad y marginación social, económica y de servicios ambientales", detalló.
Especificando lo que sucede en el centro del país, el profesor de la Escuela de Ingeniería y Ciencias considera que la deforestación es un problema que hay que considerar para explicar el fenómeno.
"Sobre todo en la parte alta de las cuencas, donde la eficiencia de captura de agua debe ser mayor; pero al perder bosques, está eficiencia disminuye", puntualizó el doctor en Conservación Ambiental.
Considera también importante la falta de un plan estratégico para recapturar, tratar, almacenar el recurso ya que su inexistencia o deficiencia limita a las ciudades a depender de sistemas grandes de bombeo como el Cutzamala.
La sequía en el norte de México tiene una relación con la historia productiva de la zona.- Pérez
"No hay que perder de vista que en zonas rurales, la escasez es significativa, ya que el recurso del cual son cuidadores, por abastecer a las urbes, se vuelve escaso y en algunos casos inexistente", enfatizó el doctor.
El sobreconsumo de agua acaba con su disposición para el uso
En esta línea, Paola apuntó que el origen de esta sequía anormal es tiene que ver con el sobreconsumo de productos como los plásticos de un solo uso, embotellados y el fast-fashion.
Agrega que “todos los productos que consumimos necesitan agua y mucha” y esto puede ser un factor importante para que la situación de sequía en México se agrave.
Según los expertos, las industrias más contaminantes son las refresqueras y embotelladoras.
“Es muy fácil llegar y envasar el agua; es muy barato hacerlo y sin embargo la compramos muy cara, ya sea por comodidad o falta de acceso al agua potable”, puntualizó Carlos.
Vilchis remarca el impacto hídrico que tiene la producción de alimentos como la carne. “En mis clases hago hincapié en reducir el consumo de carne; por cada kilo de carne se necesitan 15 mil litros de agua,”, comentó.
Para el experto, esta situación es notoria en el norte de México, cuya industria ganadera ha provocado una sobrexplotación de los recursos hídricos de una región seca.
"En mis clases hago hincapié en reducir el consumo de carne; por cada kilo de carne se necesitan 15 mil litros de agua".- Carlos Pérez
De acuerdo con los profesores, otro producto que abona a este consumo insostenible de agua es el aguacate, que para su producción en masa requiere deforestar grandes terrenos además de que requiere de grandes recursos hídricos.
La sobrepoblación y la sequía en México
Para la especialista no es solo que el ciclo del agua esté interrumpido, pues a esto se suman problemas como la distribución, desigualdad en el acceso al agua y sobrepoblación.
“Por situaciones como esta es que el agua de presas del Estado de México, cuyos niveles llegan a ser tan bajos como el 35% de su capacidad, vaya a dar a la Ciudad de México con su inmensa demanda de agua”, subrayó.
Carlos apuntó que “si concentramos todo en una sola urbe la necesidad será mayor que si tuviéramos pequeños núcleos de población distribuidos más equitativamente”.
Además, Paola dijo que en tanto bajen más los niveles de un cuerpo de agua y los terrenos sean para uso humano, aumentará la proliferación de algas que al absorber el agua restante impidan su recuperación.
¿Y qué puedo hacer?
Según palabras de maestra en Ciencias Ambientales, a pesar de se puede pensar que los ciudadanos no tenemos mucho por hacer en relación con este tema, si hacemos acciones concretas, contribuimos a combatir el problema.
"Las acciones individuales son necesarias: debemos reducir el consumo de productos como refresco, cerveza, agua embotellada, carne o ropa”, recomendó Paola.
Reutilizar el agua de la lavadora, optar por jabones biodegradables, duchas rápidas y cerrar el grifo cuando no sea necesario al enjabonarse las manos o lavarse los dientes son acciones que también suman.
Carlos recomendó además favorecer programas de reforestación sostenibles en las cordilleras y modelos de agricultura de policultivos menos agresivos para poco a poco recuperar la capacidad de captación de agua y reactivar el ciclo del agua.
“Consumamos conscientemente e informémonos de los procesos que requieren los productos que consumimos, aún estamos a tiempo”, finalizó Vilchis.
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