Ana Bárbara Romo | Campus Sonora Norte
Las alumnas Ruth Serecer y María Andrea Espinoza, acompañadas de Gonzalo Blancarte, Director de Liderazgo y Vivencia del Departamento LiFE y Alejandra Montaño, Directora Formación Social, representaron a México y al Tec en el 21 Seminario Internacional de Aprendizaje y Servicio Solidario con el proyecto Alas de Mujer.
El evento se llevó a cabo el 23 y 24 de agosto de 2018 en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires en Buenos Aires, Argentina. Se trata de uno de los espacios más valiosos de capacitación en el ámbito educativo y social, donde estudiantes, docentes, investigadores, funcionarios y dirigentes de organizaciones sociales de más de 18 países pueden encontrarse para intercambiar experiencias, conocimientos y formar redes de trabajo.
Rumbo a Argentina
Tras ganar el segundo lugar en el Premio MacJannet para la Ciudadanía Global a en marzo, uno de los miembros del comité evaluador les extendió la invitación para formar parte de este seminario donde ciertos países son seleccionados para presentar algunas de sus iniciativas.
Durante el seminario tuvieron la oportunidad de participar en talleres y charlas que les dieron una noción de lo que se hace en otras partes del mundo y se enfocan en encontrar la forma de trabajar hacia un mismo objetivo.
“Fue una experiencia muy enriquecedora. El hecho de realmente poder compartir experiencias que han trascendido en México con otros países nos abre mucho el panorama,” recordó Gonzalo Blancarte.
La alumna María Andrea Espinoza también recordarón con emoción su experiencia en este seminario internacional “El hecho de poder decir que en el Tec de Monterrey los estudiantes estamos trabajando hoy en día por transformar el futuro de nuestro país en un espacio internacional fue algo que sentí en la piel, o como nosotros decimos, te pone la piel chinita,”
Representan a México con el proyecto Alas de Mujer
Para el equipo, esta una experiencia enriquecedora. Se sienten orgullosos y honrados de haber podido representar a México, pero también lo toman como una gran responsabilidad.
“Vivir experiencias como esta, en donde los jóvenes que compartimos el espíritu por transformar el mundo nos juntamos dejando a un lado las barreras políticas, sociales y culturales son totalmente enriquecedoras pero en lo particular inspiradoras, ya que más allá de estas barreras compartimos las mismas problemáticas y estamos trabajando con distintas soluciones pero con un mismo objetivo,” concluyó Maria Andrea.
Es un compromiso para transmitir a su comunidad todo lo que aprendieron e inspirar a otros para que desarrollen este tipo de iniciativas, buscando la transformación de la sociedad en la que vivimos para poder construir el futuro que tanto anhelamos para nuestro país.
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