Diana Itzel Marín Salazar | Campus Puebla
El pasado 8 de marzo, se llevó a cabo la premiación “Mujer Tec en el campus Monterrey”, con motivo de la conmemoración del Día de la Mujer.
En esta ceremonia, la doctora Adriana Erika Martínez Cantón, profesora de la Escuela de Ingeniería y Ciencias y actualmente Coordinadora de la Academia de Física del campus Puebla, obtuvo el galardón en la categoría Vida y Trabajo.
El premio de esta categoría se otorgó a aquellas mujeres que son un ejemplo de conciliación entre vida y trabajo y que promueven programas o buenas prácticas de conciliación de la vida personal, familiar y laboral.
La doctora Martínez se hizo acreedora al premio debido a su arduo trabajo en la fundación U.S.- Mexico Leaders Network en el programa Mujeres Líderes en STEAM, que consiste en apoyar a jóvenes de zonas rurales de todo el país para elegir su carrera, e inspirarlas a que sigan estudiando, acompañándolas durante un año, antes de acceder a la universidad.
El objetivo del proyecto es que ellas puedan conocer un poco más de diferentes áreas en las que están interesadas.
“Lo importante aquí es poder apoyar a las chicas, es darles acompañamiento, que ellas vean que pueden salir de su zona, de sus pequeñas ciudades o pueblos y cumplir sus sueños” apuntó Martínez.
Además, la profesora también trabaja en el colegio de sus hijos en el programa de “Mamás de apoyo”, que se dedica a hacer obras sociales o comunitarias, al involucrar a la sociedad del colegio, con el objetivo de que los niños se sensibilicen con situaciones de vida que van más allá de su contexto.
La ceremonia de premiación contó con la presencia del presidente del Tecnológico de Monterrey, Salvador Alva y de David Garza, rector del Tecnológico de Monterrey.
Durante su discurso, la catedrática habló sobre las mujeres que trabajan y además son jefas de familia, que, de acuerdo a datos de la Asociación de Mujeres Empresarias de México, son cerca de 4.3 millones.
“De sus ingresos la mujer aporta el 70% a la comunidad y a su casa, mientras que el hombre solo aporta entre el 30 y 40%” mencionó la profesora.
La maestra Martínez señaló que fuera de la satisfacción personal, este es un reconocimiento a los logros de muchas mujeres, a su trabajo que mucha veces queda “entre sombras”, un trabajo cuyos logros queden expuestos a la luz pública y que al mismo tiempo, inspiren a más chicas a alcanzar sus objetivos, por más difíciles que parezcan.
“Hay que acabar con la idea de que si las mujeres triunfamos en el trabajo nos vamos a quedar solas. Eso no es cierto. En algún momento podemos encontrar ese equilibrio. Yo tengo dos hijos y si ellos ven que mamá y papá van a la par, cuando ellos crezcan van a tener una pareja y formar un hogar que vaya a la par, quitando esos prejuicios”.
Martínez cree que la relevancia, más allá de un premio, es lo que se puede transmitir a las nuevas generaciones de mujeres.