Debido a la celebración del Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor, así como de los 10 años del programa Pasión por la Lectura del Tec de Monterrey, fue presentado de manera virtual el “Libro de Eva”, de Carmen Boullosa.
“Responde a mi pasión por la ficción, cuenta un personaje, ve una temperatura de nuestro tiempo y responde a mitos que son creaciones colectivas impresas, de boca en boca para representar lo que quisieran fuese el mundo presente y nuestro origen” explica la autora.
En la charla mediada por el doctor Rodrigo Esparza, catedrático del Departamento de Estudios Humanísticos, la escritora llevó a los presentes a imaginar posibles respuestas de Eva, ante interrogantes históricas sobre su figura.
La versión de Eva
Carmen Boullosa relata que si Eva hubiera quedado impresa como la imagina y no como quedó dicha por la voz de Adán, la historia contemporánea no comprendería los niveles de inequidad social que existen hoy.
Boullosa considera que, de esa manera, las mujeres no hubieran representado la fuerza oculta y no retribuida económicamente por cuidar, vestir, alimentar; por las funciones femeninas no consideradas trabajo por un varón.
“Lo que hago es tratar de volver a darle la voz a Eva como yo imagino que pudo haber sido y no hubiese sido acuñada como quedó. El del conflicto es Adán, ya que es arrastrado por Eva a dejar las comodidades del paraíso”.
En la trama, la escritora relata que cuando Eva y Adán llegan a la tierra no es por voluntad de Adán, es por voluntad de Eva y que debido a lo que encuentran, Adán da un paso atrás mientras que Eva desarrolla curiosidad y apetito por el conocimiento.
“Lo que hago es tratar de volver a darle la voz a Eva como yo imagino que pudo haber sido y no hubiese sido acuñada como quedó. El del conflicto es Adán, ya que es arrastrado por Eva a dejar las comodidades del paraíso”.
Boullosa señala que la novela no indica a dónde ir, sino dónde repensar las cosas y que representa como las personas pueden llenarse otra vez de preguntas, a las que describe como “un motor fantástico”.
En el libro, la novelista hace una invitación a sentir otra vez, a percibir a la tierra y sus sonidos, tal como lo hiciera Eva al salir del paraíso para llegar a la tierra en una especie de liberación.
Ante los presentes, la escritora confesó que en un momento estuvo a punto de abandonar el proyecto de este libro, pero que repentinamente fue como si la voz de Eva se metiese en su cabeza para la continuación de su historia.
“Yo iba siguiéndole los pasos, escuchando su voz, siguiendo las notaciones de a dónde iba; traté de pelear un poco con ella, de decirle a ver no, no es por ahí, y a Eva le valía y decía que ella era la que estaba hablando”.
Escritora prolífica
Dramaturga, ensayista, poeta y novelista, Carmen Boullosa nació en la Ciudad de México y cuenta con al menos una veintena de libros.
Antes, La salvaja, Tejas, El libro de Ana y otras, son parte de sus obras que han sido traducidas al alemán, inglés, italiano, francés y holandés.
“No pienso en vender ejemplares, que alguien lea mi libro es un regalo enorme, sobre todo para el oficio de un escritor auténtico, para lo que es el arte literario, que es un arte y una brújula para todos”.
Estudió Letras Hispánicas en la Universidad Iberoamericana y Universidad Nacional Autónoma de México; ha dictado conferencias en Alemania y Holanda y ha sido profesora invitada en Universidad de Columbia, Universidad de Nueva York y otras.
Cobra fama internacional al ganar los premios Xavier Villlarrutia, Anna Seghers de Berlin, Liberatur de Frankfurt, Café Gijón de Madrid y recientemente, el Jorge Ibargüengoitia por la Universidad de Guanajuato.
Se describe a sí misma más como una arqueóloga que como inventora, al considerar que su labor es desmenuzar hechos y ver qué está delante.
Cuando escribe, Carmen tiene la sensación de descubrir el libro más que de hacerlo; se obsesiona y escudriña los detalles, aunque le parezcan pequeños.
“No pienso en vender ejemplares, que alguien lea mi libro es un regalo enorme, sobre todo para el oficio de un escritor auténtico, para lo que es el arte literario, que es un arte y una brújula para todos”.
10 años de pasión por la lectura
Carmen Boullosa celebró que instituciones como el Tec de Monterrey cuenten con espacios como Pasión por la lectura, ya que incentivan la imaginación.
“Leer es comprender que los otros existen mientras usamos una aventura individual que es la lectura, es comprender que existe la naturaleza, entender que cada persona es distinta; es el respeto a la voluntad y la conciencia distinta a la nuestra”.
Boullosa comenta que, al leer en solitario, las personas entienden los libros de manera distinta e imprimen en ellos su propia huella digital, al tiempo que miran lo que son los demás.
La literata invitó a cultivar desde la infancia la pasión por la lectura, ya que considera que deja una impronta en el cerebro, en el comportamiento humano y en el cognitivismo, además de generar pasión para todo.
Encuentros con universitarios
Finalmente, Carmen Boullosa lamentó que los encuentros con estudiantes y el público no sean presenciales.
“Para mí esa energía que hay en el aula, esa energía que hay en un espacio de conferencias, de pláticas con gente joven es algo increíble, leen de otra manera, traen nuevas inquietudes y respiran vida, y eso para mí es muy importante”.
Boullosa cree que los encuentros con los lectores son importantes y tiene el deseo de que la gente regrese a un mundo presencial.
“Nunca es lo mismo, la ventaja de la virtualidad es que viene gente de otros lados muy distintos; sé que encontraremos una combinación”.
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