Alejandro Navarrete y Asael Villanueva | Redacción Nacional
¿Qué es lo que hace que seamos felices? ¿Es posible aprender a ser feliz?
Aunque son dos preguntas que la Humanidad se ha hecho desde siempre, en los últimos 30 años, académicos de todo el mundo han comenzado a analizarlas de manera más seria y metódica.
En Harvard, por ejemplo, una de las materias con el récord de más alumnos en la historia de la universidad es la de Psicología Positiva que impartió Tal Ben Shahar, ahora creador de la Academia de Estudios para la Felicidad.
Ahora, Tal Ben Shahar afirma que diversos estudios han mostrado que hay cinco elementos clave en la percepción de felicidad:
- bienestar espiritual,
- bienestar físico,
- bienestar intelectual,
- bienestar relacional y
- bienestar emocional
Paradójicamente, dice Ben Shahar, buscar la felicidad directamente nos hace más infelices. “Si ves la luz del sol directamente, tus ojos te dolerán, pero si la ves reflejada, por ejemplo en un arcoíris, podrás apreciarla y disfrutarla”, afirma.
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LOS SECRETOS DE LA FELICIDAD
En el 6to Foro de la Felicidad 360 en México, organizado en Monterrey por el Instituto de Ciencias de la Felicidad de Tecmilenio, Ben Shahar y varios otros estudiosos compartieron su visión sobre este tema este fin de semana.
Varios de las recomendaciones se repiten entre ellos: ejercicio, meditación, adopción gradual de hábitos saludables, vivir una vida agradecida y de relación cálida con otros, tener mentores y ayudar a otros, etc.
“(Ser más feliz) lo puedes lograr haciendo las cosas de manera agradecida, dando lo mejor, interactuando con otros, dando siempre de ti y ayudando a las personas”, sintetiza Caroline Miller, también reconocida pionera en Psicología Positiva, en entrevista con CONECTA.
Miller, además de académica y especialista, es una nadadora competitiva de alto rendimiento. Uno de sus testimonios es cómo, de joven, logró alejarse de la bulimia, teniendo esperanza por ver una mujer que lo había superado.
Ahora, Miller se ha especializado en el logro de metas y afirma que es importante aprender a ir lográndolas poco a poco, desglosando los grandes objetivos, en pequeñas tareas alcanzables.
Tal Ben Shahar coincide en esto, afirmando que nuestra fuerza de voluntad es limitada, pero es posible instaurar hábitos y rituales que poco a poco vayan acercándonos a la vida que queremos.
Nuestra fuerza de voluntad es limitada, pero es posible instaurar hábitos y rituales que poco a poco vayan acercándonos a la vida que queremos.
En tanto, Meik Wiking, director ejecutivo del Instituto para la Búsqueda de la Felicidad de Copenhague, Dinamarca, ha dedicado su vida a encontrar por qué se es más feliz en unas ciudades o países que en otros.
En entrevista con CONECTA, sostiene que la felicidad depende, sí, en un porcentaje del lugar de nacimiento y la situación de cada persona, pero aun así se puede aprender a ser feliz
“Hay cosas y factores que nos hacen sentirnos felices y podemos aprender a hacerlas e incorporarlas a nuestras vidas y al diseño de nuestras ciudades”, estima.
“Hay cosas y factores que nos hacen sentirnos felices y podemos aprender a hacerlas e incorporarlas a nuestras vidas y al diseño de nuestras ciudades”.- Meik Wiking
Enlista temas como la cantidad de ejercicio, la economía, el balance vida – trabajo, la confianza social y la generosidad como elementos que hacen que, por ejemplo, los países nórdicos salgan siempre arriba en los rankings de felicidad.
No obstante, agrega que es notable cómo en México y Latinoamérica, los índices de felicidad no son malos, a pesar de las situaciones sociales y económicas.
“Ustedes lo están haciendo bien. Algo podemos aprender de ustedes… el secreto mexicano”, dice.
“Ustedes lo están haciendo bien. Algo podemos aprender de ustedes… el secreto mexicano”.- Meik Wiking.
LA FELICIDAD INDIVIDUAL Y LA COMÚN
De acuerdo a Tal Ben Shahar, la razón de los índices registrados de felicidad en México y Latinoamérica son claramente las relaciones familiares y de amistad tan sólidas que se dan en la región.
También, agrega, un sentido de propósito en la vida, muy ligado a la religión, son factores que hacen destacar a Latinoamérica como área de no poca felicidad.
Ben Shahar y Miller coinciden, no obstante, en que los estudios muestran que las nuevas generaciones, más dadas, por ejemplo, a relaciones virtuales, están perdiendo eso, y sus índices de felicidad en la región no difieren de Estados Unidos u otros países.
En cuanto a las relaciones de pareja, James Pawelski, del Centro de Psicología de la Universidad de Pensilvania y su esposa Suzann, escritora y consultora, sostiene que un error común es buscar que la otra persona te complete, en vez de que más bien nos complemente.
“Sabemos, por investigaciones, que cuando alguien te inspira, hay cambios incluso fisiológicos en tu cuerpo. Y lo que pasa internamente, te abre para conectar con el otro y ser mejor persona”, afirma Suzann.
Estudios muestran que las nuevas generaciones, más dadas, por ejemplo, a relaciones virtuales, están perdiendo eso, y sus índices de felicidad en Latinoamérica no difieren de Estados Unidos u otros países.
LA ENSEÑANZA DE LA FELICIDAD
El estudio de la felicidad es un tema que en México tomó la universidad Tecmilenio, con la creación, hace ya algunos años, del Instituto de Ciencias de la Felicidad, en el cual el propio Tal Ben Shahar es líder del consejo consultivo.
Por ese enfoque, Tecmilenio ha sido llamada “la primera universidad positiva del mundo” por el pionero de la psicología positiva Martin Seligman.
“El ser humano puede aspirar a ser una mejor persona y tiene la posibilidad de cultivar su mejor versión, así como un diamante es valioso por su fortaleza y la manera en que fue pulido”, sostiene Héctor Escamilla, rector de la institución.
Rosalinda Ballesteros, líder del Instituto de Ciencias de la Felicidad, sostiene a su vez: “Buscamos hacer conciencia sobre todo en el momento actual en donde hay tantas cosas que nos estresan en todos los ambientes”.
“Por un lado, buscamos el éxito y creemos que una vez que cumplamos nuestras metas personales vamos a ser felices y es al revés, las personas que están muy bien en sus estados emocionales son las personas que logran sus metas”, agrega.
“Ciertamente la felicidad y el bienestar es algo que puedes aprender, es medible y enseñable”.- Mathew White
En el foro de Tecmilenio, otro académico, Mathew White, profesor de la Universidad de Adelaide en Australia, reitera a CONECTA: “Ciertamente la felicidad y el bienestar es algo que puedes aprender, es medible y enseñable”.
Al final, cientos de asistentes al foro sonríen y se toman fotos delante de un gran cártel gigante de colores que reza: “La felicidad se aprende”. Parecen haber sido convencidos y ya estar dispuestos a probarlo.