Luis Mario García | Campus Monterrey
La mejor manera de distinguir a Don Eugenio Garza Sada y Don Eugenio Garza Lagüera, fundador y presidente del Consejo del Tecnológico de Monterrey, respectivamente, es continuar con su legado y la formación de líderes transformadores, manifestó Salvador Alva, presidente de la Institución.
“Sin duda la mejor forma de honrar la memoria de estos grandes hombres es tratar, cada uno de nosotros, de caminar en sus huellas y llevar más lejos la cosecha de la semilla que ellos plantaron”, expresó en la guardia de honor para recordar a ambos líderes del Tecnológico de Monterrey.
“A continuar con su legado en el Tec para liberar el potencial transformador de todos nuestros estudiantes para beneficio de México”, añadió.
La guardia de honor se realizó en el Panteón El Carmen el 17 de septiembre por la mañana, en el 45 aniversario luctuoso de Don Eugenio Garza Sada; también se conmemoró el décimo de Eugenio Garza Lagüera, quien falleció el 24 de mayo del 2008.
Directivos, profesores, alumnos y más integrantes de la Comunidad Tec asistieron al lugar para guardar un minuto de silencio, y después brindar uno de aplausos, en memoria de ambos.
También estuvieron presentes José Antonio Fernández, presidente del Consejo del Tecnológico de Monterrey, así como consejeros y directivos de FEMSA.
Alva señaló que los líderes actuales de la Institución se comprometen a defender sus ideales para formar a esos hombres y mujeres que puedan desafiar los retos que el mundo depara y cerrar las brechas de inclusión y desigualdad que existen en la actualidad.
Dentro del evento Luis Lauro Torres, presidente de la Federación de Estudiantes (FETEC), manifestó que los valores de Eugenio Garza Sada siguen vigentes en los alumnos.
Por su parte, Marla Rodríguez, estudiante de la Licenciatura en Relaciones Internacionales (LRI), mencionó que los rasgos de humildad y liderazgo de don Eugenio Garza Lagüera quedaron plasmados en la Institución.
En el mismo día previamente se realizó una guardia de honor realizada por FEMSA, empresa que lideraron ambos personajes regiomontanos.