Luis Mario García | Campus Monterrey
El Tec de Monterrey anunció la creación del Espacio de Reflexión dentro del campus Monterrey, que brindará balance físico, mental y emocional a estudiantes y a la comunidad en general.
Este proyecto, que es una iniciativa del DistritoTec, fue anunciado el 6 de diciembre en una ceremonia en el edificio de Rectoría.
Este espacio estará ubicado en el jardín a un lado de la explanada del Centro de Biotecnología FEMSA y servirá para promover el florecimiento humano, lo cual es parte de la visión 2030 del Tecnológico de Monterrey, manifestó Salvador Alva.
En este espacio los visitantes tendrán un lugar para reflexionar y encontrarse con uno mismo, olvidarse por un momento de su quehacer diario y vivir uno de introspección, señaló el presidente del Tecnológico de Monterrey.
Buscar el bienestar integral del alumno es uno de los fundamentos del área de Liderazgo y Formación Estudiantil (LiFE), por lo que el nuevo Espacio de Reflexión se suma a esta iniciativa, destacó Bruno Zepeda, vicepresidente de Operaciones de la Institución.
Este es uno de los esfuerzos del Tecnológico por permanecer cercano a la comunidad, ya que será un lugar abierto para todos, señaló José Antonio Torre, director de Urbanismo e Infraestructura y líder del proyecto de DistritoTec.
El Punto Blanco del campus Monterrey ha servido como base para concebir el nuevo lugar, señaló Martha Sañudo, fundadora de este espacio.
La profesora del campus manifestó que los beneficios que ha brindado Punto Blanco a la comunidad, el cual ha tenido alrededor de 5 mil visitantes desde que abrió, son:
- Un lugar de encuentro profundo.
- Puntos de encuentro espirituales.
- Encontrar en el otro una dimensión espiritual.
Además, promueve la meditación, con la cual se puede aprender a controlar la presión arterial y enfocar la mente, y se espera que le nuevo espacio continúe con esta labor.
Diseño innovador
El despacho de arquitectura T.A.X es el encargado de darle forma al proyecto, liderado por Alberto Kalach, el cual constará de dos plantas: una para la reflexión personal y otra para el encuentro con la naturaleza.
La arquitectura del espacio rinde un tributo a la honestidad de los materiales, en este caso concreto, y estará cobijado por sombras y luz, por sutiles sonidos y profundos silencios, manifestó Raquel Font, arquitecta que participa en el proyecto.
La inversión es de alrededor de 3 millones de dólares y se recaudó a través de donativos.
Se espera que el espacio esté listo para el inicio del 2020, mientras tanto Punto Blanco, ubicado en el Centro de Congresos, permanecerá abierto.
El nuevo lago de los patos estará ubicado entre el Edificio VII y la Arena Borregos.