El principal problema que enfrentan las personas con discapacidad es que la sociedad no les brinda las mismas oportunidades, ya que son vistos como 'diferentes', indicó Laura Soler, diputada autonómica del PSOE en las cortes valencianas, en España.
“El problema no está en nosotros, sino que es la sociedad la que va cerrando puertas”, expresó la también activista, quien nació con parálisis cerebral, dentro del Foro de Inclusión de personas con discapacidad del Tec de Monterrey.
“El problema no es la persona que va en silla de ruedas en Monterrey, sino es la sociedad de Monterrey que no lo deja subir al camión.
Porque si se puede subir al camión como cualquier otra persona no se da cuenta de su problema”, añadió en la conferencia “Vivamos sin límites” que ofreció en el Pabellón La Carreta.
La doctora en Filosofía Hispánica dio como ejemplo un viaje que tuvo a inicios de la década del 2000 a Vancouver, donde notó que la ciudad era accesible a ella (se traslada en silla de ruedas) lo que le abrió los ojos.
“El problema no era yo con mi discapacidad, el problema era la sociedad la que me hacía a mí discapacitada, no dejarme llegar a dos sitios”, manifestó.
Por esa razón es trascendental que las personas con discapacidad peleen por sus derechos y se hagan presentes en la sociedad.
“Es muy importante la visibilización y que la gente con discapacidad tome el espacio público, se adueñe de él, que es igual de ellos. Es de todos, y para eso se tiene que ver, se tiene que tocar”, comentó.
La parálisis de Soler no le permite caminar ni mover bien su brazo izquierdo, y cuando nació lo doctores le dieron un 2 por ciento de probabilidad de vivir.
Ella relató a los asistentes las diferentes dificultades que tuvo que pasar para poder desarrollarse, como cuando iba a ingresar a primaria y algunos profesores les comentaron a sus padres que debía desertar ya que no podía escribir.
A pesar de eso, pudo aprobar a través de exámenes orales, tener una destacada trayectoria profesional y convertirse en una líder en su país en temas de inclusión.
Otro de los problemas que enfrentan las personas con discapacidad es la imagen de pena o lástima que a veces se tiene de ellos, la cual debe erradicarse, indicó.
“Somos personas como los demás, lo que queremos es derechos, no caridad social. Cuando consigamos cambiar ese concepto llegaremos mucho más lejos”, apuntó.
También dijo que es indispensable tener en cuenta todo lo que una discapacidad puede brindarle a la persona que la padece.
“Lo que más me ha dado la discapacidad siempre ha sido la capacidad de desarrollar mis capacidades y no el contrario. También la discapacidad me ha dado la oportunidad de valorar mucho las cosas y de superar dificultades, y aprender a valorar mucho lo que tengo”, dijo.
Los únicos límites que tienen las personas son los que se dan ellas mismas, y aunque aseguró que es bueno tenerlos en ciertos aspectos, no deben ser impedimento para ser feliz.
“El único límite que tenemos son vosotros mismos, no vivamos sin límites porque no sea que nos tiremos en un paracaídas.
“Nunca dejemos de creer en lo que sí podemos llegar a ser, porque se tarda más o menos, pero se llega, de verdad que sí”, manifestó.
Al evento asistieron alumnos, profesores y personas de la comunidad.
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