Des[igualdad], proyecto que tiene como premisa la creación de infraestructura en la ciudad para incluir a personas con discapacidad visual, a partir de dar una segunda vida a materiales como aluminio y llantas usadas, fue el ganador de la primera edición del “Desafío Circular” organizado por Movimiento Circular y DOW México.
Dicho proyecto fue desarrollado por seis estudiantes del Tecnológico de Monterrey, campus Estado de México, como parte de la materia Procesos ecológicos para el desarrollo humano bajo la dirección de la doctora Elena Olvera, profesora y directora del departamento de Tecnologías Sostenibles y Civil, de la Escuela de Ingeniería y Ciencias.
“Me siento muy orgullosa de todo el esfuerzo, del entusiasmo que demostraron durante todo el semestre, yo fui testigo de cómo esas ideas se fueron formando,
“Me quedo con una satisfacción enorme, se logró permear la responsabilidad social y el cuidado del ambiente, quedó claro qué es la economía circular, esa aportación que ayude a construir las ciudades sostenibles y un mundo más agradable para todos, sin dejar de lado las problemáticas sociales”, compartió la profesora.
Alianza de Movimiento Circular y Tec de Monterrey
Esta iniciativa, se dio en el marco del convenio de colaboración institucional y académica firmado entre Movimiento Circular, que tiene a Dow México como socio pionero y el Tecnológico de Monterrey, campus Estado de México.
Durante la clausura y premiación del reto se presentó un top 3 de los proyectos finalistas, donde Magdalena Flores, gerente de Comunicaciones Comerciales de DOW México, brindó un mensaje a todos los estudiantes del Tec campus Estado de México.
“Creemos que la sustentabilidad tiene un gran significado de responsabilidad de todos en conjunto para lograr darle una mejor oportunidad a nuestro planeta y creemos desde el punto de vista de DOW que la sustentabilidad tiene que ver con la parte de economía circular, para cerrar ese ciclo,
“La parte educativa es un pilar esencial para generar esta solución que estamos buscando a través de la circularidad, no solo desde la perspectiva de DOW sino desde la perspectiva del Movimiento Circular, y por supuesto las instituciones educativas que hacen posible que sigamos difundiendo estas iniciativas de tomar acción” explicó Magdalena.
Por su parte, Marisol Del Toro, de Movimiento Circular, agradeció a los estudiantes el interés en la economía circular y generar nuevas propuestas para tener un mejor planeta.
“Una de las cosas más interesantes que tuvo este desafío fue que pone a pensar no solo en el presente, sino también en el futuro, proyectar en la esperanza, en la inclusión de las personas, generar un negocio no solo de beneficio económico sino social, eso me parece que es lo más valioso del proyecto,
“Poner al servicio de los demás nuestro conocimiento para hacer un bien social, es lo más que aspiramos todos los profesores que buscamos que los estudiantes se vinculen hacia allá, pero además que cada persona puede dejar una huella positiva y ecológica en el mundo en el que vivimos”, señaló.
Influencer ambientalista alienta a los estudiantes
Chantal Chalita, influencer ambientalista tapatía con más de 64 mil seguidores en Instagram fue la encargada de dar a conocer a la propuesta ganadora.
La ingeniera ambiental y creadora de Green Me, brindó un emotivo mensaje a los estudiantes invitándolos a seguir avanzando con este tipo de iniciativas para tener un mejor planeta.
“Esta plataforma es para ayudarlos a visibilizar todos esos proyectos increíbles que están logrando por medio de la economía circular para resolver problemas que nos topamos a diario,
“Quiero reconocer sus esfuerzos y proyectos porque en todos estos años que llevo trabajando en las redes sociales, conferencias, pláticas para promover el medio ambiente y la sustentabilidad, lo que ustedes están haciendo en estos proyectos, no tienen idea la trascendencia que va a tener, sigan adelante, porque ustedes van a transformar el mundo en el que vivimos”, compartió.
El proyecto ganador con impacto social
Finalmente, los estudiantes compartieron su sentir al saberse ganadores del reto.
“Esperamos que contribuya al bienestar de las personas que más lo necesiten, ya sea en rampas para sillas de ruedas, barandales y otros tramos difíciles con señalética braile”, aseguró Daud Andriano.
Además como beneficio adicional, los estudiantes impulsarán la economía circular al hacer uso de materiales reciclados de otras industrias, que de otra manera serían desechados y desaprovechados.
“De esta manera, nuestro proyecto pretende atacar estas dos problemáticas importantes para México, contribuyendo a un país más incluyente, al mismo tiempo que ayudamos a nuestro medio ambiente y generamos una economía circular, hagamos de este sueño, una realidad”, puntualizó Camila Espinosa.
Los integrantes del equipo ganador son: Camila Espinosa y Mariel Herrera, ambas estudiantes de cuarto semestre de Negocios internacionales, Mariana Gasca de cuarto semestre de desarrollo organizacional, Diana Cervantes de segundo semestre de Arquitectura, Daud Andriano, de cuarto semestre de ingeniería civil y Mario González, de segundo semestre de ingeniería en mecatrónica.
“Es muy satisfactorio ver cómo se generó esta conciencia de que un proyecto de circularidad, puede ser inclusivo y generar impacto económico.
“Tienen ya una idea muy puntual de todo lo que signifca circularidad y que no solo tiene que ver con el mundo de los plásticos, sino que nos ayuda a ver el valor de los materiales y a identificar distintas formas de lograr una circularidad incluso desde el punto de vista de los alimentos”, concluyó Magdalena Flores.
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