Hannia Ahumada | Campus Querétaro
Gustavo Peñaloza es alumno de noveno semestre de la carrera de Arquitectura en el Tecnológico de Monterrey Campus Querétaro. Actualmente, participa en el Semestre i “PlayLab Menchaca 2018”, el cual es coordinado por la profesora Mariana Maya, y está conformado por un grupo multidisciplinario de alumnos
El objetivo del Semestre i es trabajar con la zona de Menchaca para tratar las problemáticas sociales de la comunidad a través del diseño. Es una cuestión multidisciplinaria que trabaja una propuesta de diseño a escala urbana y/o arquitectónica, estrategia que pretende regenerar el tejido social, especialmente con enfoque hacia los niños de la colonia.
Gustavo comenta que pasan mucho tiempo conviviendo en la comunidad en tiempo variado, en ocasiones acudiendo hasta fines de semana. Este proyecto inicia cuando el gobierno recurre a PlayLab debido a que la mayoría de las intervenciones no han logrado los resultados esperados, o generado un impacto significativo.
Se divide en 3 retos: el primero consiste en investigar e involucrarse en la comunidad, el segundo trabaja con el prototipado, ideación y codiseño de la propuesta, el tercero es la construcción y aplicación de la misma.
“Desde un principio sabíamos que era un reto muy grande, pero a lo largo de estos meses que hemos trabajado me siento muy contento y entusiasmado por el resultado final que se va a presentar, sin duda ha sido muy complicado, muchos obstáculos se han tenido que enfrentar a lo largo del camino. Creo que ahí están los momentos de mayor satisfacción, cuando la comunidad se acerca y te da las gracias.” comparte Gustavo.
Se pretende que los alumnos generen dos grandes cambios dentro del proceso de aprendizaje en sentido humano: empatía y responsabilidad. Lo cual se genera conociendo y relacionándose con la comunidad de Menchaca, descubriendo e intentando resolver los conflictos sociales que la afectan. Les enseña que como ciudadanos todos somos responsables de lo que ocurre en a nuestro alrededor en todos contextos, además de empoderarlos al exigir un cambio en el entorno.
“Es muy interesante ver cómo después de Semestre i estos alumnos ya solos empiezan a generar sus propios proyectos, cómo ya tienen un impacto en su comunidad”, finaliza Gustavo.