Antonio Leal | Campus Sinaloa
Humberto Gómez es un ex alumno del Tecnológico de Monterrey (EXATEC) que estudió artes escénicas durante la preparatoria, lo que le brindó la oportunidad de trabajar como maestro de baile y teatro musical en el Tec.
Durante el tiempo que trabajó, y mientras estudiaba la Licenciatura en Negocios Internacionales, dividía su tiempo entre ir a clases por la mañana, por la tarde impartir sus talleres, y ensayos los fines de semana.
Asimismo, comentó que mientras ofrecía sus talleres, los pasillos eran su salón de clases.
“Las limitantes nos permitían hacer más cosas […] te llevan a sacar lo mejor de ti y a desarrollar más tu creatividad y a buscar otros caminos”
Después de 6 años de impartir clases en el Tec decidió buscar otros caminos, por lo que su experiencia le permitió viajar y vivir en diferentes ciudades hasta que conoció a la dueña de un periódico japonés en México llamado México Shimbun.
Actualmente, se encarga de la gerencia general del periódico, realizando actividades muy variadas como asistir a eventos y platicar con editores, aplicando lo que aprendió para cooperar con una cultura diferente a la suya.
Expresó que visitó Sinaloa debido a que fue reconocido como profesor que deja huella, un reconocimiento donde EXATEC responden una encuesta sobre los profesores que los inspiraron y les dejaron huella en su vida, siendo él uno de los seleccionados tras 17 años que dejó de impartir el taller.
“No lo esperaba y 17 años después menos. Fue muy chistoso, cuando me hablaron y me dieron la noticia no lo creía. Si se acordaron de mí es que algo bueno se logró”.
Uno de sus ex alumnos, Carlos Castro, quien es el maestro encargado de impartir el taller de creación literaria en campus Sinaloa, comentó que participó en dos comedias musicales bajo la dirección de Humberto.
"Fue una de las mejores experiencias que me dejó el campus, Humberto no solamente tiene talento para la puesta en escena, tiene un talento a nivel profesional, cuenta con dotes de liderazgo y desarrollo de personas que lo hacen ver lo mejor de las personas que están en su grupo".
Además, Carlos mencionó que el profesor podía desarrollar y aprovechar el talento de manera que la persona se descubra a sí misma, sin necesidad de ser riguroso con la metodología y exigencia, ya que lo importante era darle confianza a sus alumnos y hacerlos descubrir que podían expandir los límites de lo que creían que podían hacer."
Para cerrar su conversación con CONECTA, Humberto relató una historia que le contó uno de sus maestros durante su vida estudiantil.
"Un alumno se acercó a mi maestro pidiendo consejo sobre qué camino tomar en su futuro. Él respondió que fuera por aquello que haría gratis. El alumno pensó y dijo que sería construir castillos de arena, y mi maestro lo incitó a construir castillos de arena. Actualmente, diseña y construye edificaciones".
Con esta historia, Humberto concluyó que las personas deben dedicarse a aquello que aman por qué siempre buscarán ser mejores en ello.
"Si lo amas, vas más allá. No hay tiempos, ni limitantes de espacio o de horas”