La novela contó con el apoyo de la maestra Ana Lilia Ramos del área de Español y Literatura que apoyo en revisar redacción y ortografía
Marian Fernández Álvarez, alumna de cuarto semestre de la PrepaTec Querétaro publicó una novela corta de misterio centrada en una relación de madre-hija, enfocándose en la complejidad y misterio que conllevan estas uniones,
El significado del título viene de la búsqueda de una palabra rebuscada que le ayudara a ponerle el nombre a su libro, y encontró una palabra que le dejó un mensaje que encajaba a la perfección con su historia y fue el de “Historias Equivocadas”.
El inicio se basó en la relación con su mamá y de los misterios que puede haber entre dos personas tan unidas, es ahí donde quiso plasmar la idea de la complejidad de las relaciones humanas.
“Me estaba comparando con mi propia relación con mi madre, pero mientras iba desarrollando la historia me di cuenta que me había metido en un mundo nuevo y que la historia que estaba creando era completamente distinta”, resaltó Marian.
El libro lo empezó a escribir hace un año y la la publicación salió cinco meses después en una editorial de Querétaro, los primeros 10 libros comenzaron a ser publicados en agosto.
"Quise darle un toque llamativo al narrar las historias desde diferentes puntos de vista"
Recorrido literario de la alumna
La idea de la trama surgió en un ejercicio de secundaria, pero en ese tiempo lo tomó como un pensamiento fugaz, aunque guardó el ejercicio que, para su sorpresa, terminó desarrollando lapso después.
Principalmente ella tenía miedo de escribir, pues sentía cierta vulnerabilidad al expresarse de forma escrita, pero se dió cuenta de que ese miedo fue lo que más la impulsó a querer redactar la novela.
“Se volvió un reto para mi, pero me di cuenta que esto es lo que realmente me apasiona”, mencionó la alumna.
"Quise darle un toque llamativo al narrar las historias desde diferentes puntos de vista", comentó Marian.
Apoyo en su trayectoria
Marian mencionó recibir indirectamente el apoyo de la maestra Ana Lilia Ramos García, pues sin saberlo, ésta la ayudo en sus clases con elementos de redacción y ortografía que le permitieron expandir sus habilidades.
“Ella me brindó mucha ayuda sin darse cuenta y fue lo que más me impulsó a seguir escribiendo”, comentó Marian.
A su vez, recibió todo el apoyo por parte de su familia, lo cual tomó con calidez, pero la escritora menciona que desde que comenzó a escribir sabía que ella sería quien debía demostrarse a sí misma que sí se puede.
“Yo me inspiré para seguir adelante, el trabajo salió de lo que estaba dispuesta a conseguir”, concluyó la alumna.
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