Desde ser host en Disney hasta dar cursos a empleados de Schneider, Amalia Armendáriz Guajardo ha complementado sus estudios en el campus Monterrey con experiencia laboral y en grupos estudiantiles.
La joven, quien se graduará de la Ingeniería Industrial y de Sistemas, desde el inicio de sus estudios profesionales buscó la manera de llegar a una de sus metas: tener trabajo antes de graduarse.
“De mis hermanos mayores yo vi el camino que ellos hicieron y que se graduaron ya con trabajo y dije ‘sabes qué, yo también quiero'.
“Pero para lograrlo tengo que empezar a prepararme y la verdad es que fue sin querer, no fue como que lo planeé, pero así se fue dando”, señaló la originaria de Monterrey.
Amalia fue reconocida por Liderazgo y Formación Estudiantil (LiFE) como alumna destacada en el área de Desarrollo Profesional.
"De mis hermanos mayores yo vi el camino que ellos hicieron y que se graduaron ya con trabajo y dije ‘sabes qué, yo también quiero'".
Sus primeras experiencias profesionales
Fue en el cuarto semestre cuando la estudiante tuvo su primer empleo formal como maestra en un colegio privado.
Después, en el verano del 2019 pudo tener un verano de trabajo en Disney, en el restaurante Animal Kingdom, donde se encargaba de recibir a los clientes y ubicarlos en sus mesas.
Además de conocer el trabajar bajo presión, en esos meses aprendió la cultura de esta empresa dedicada al entretenimiento.
“Está muy padre porque es una cultura que tú dirías claro, desde México tú sabes del servicio al cliente, el cliente es primero, siempre como que tratarlo muy bien, pero en Disney una de las claves es el show.
“Y nosotras como cast members, no nos llamamos empleados, por lo mismo de que el invitado que llega está viviendo su película, él es el príncipe o la princesa y va a tener todo el parque para él. Nosotros somos parte del cast que va a actuar en su película”, explicó la alumna del Tec de Monterrey.
También conoció las cuatro keys de Disney: Safety, courtesy, show y efficiency, y recibió cuatro reconocimientos por su cortesía y eficacia.
A su regresó fue intern en campus Jobs, apoyando al evento Conexión Tec, muestra final de proyectos de ingeniería.
Participó en el Semestre i con la empresa Ragasa, enfocado a su carrera y tuvo como objetivo generar propuestas de mejora a la cadena de valor de la empresa agroindustrial.
“Yo estaba en planta. Fuimos a analizar lo que lo estaba causando, cuánto se desperdiciaba de cada cosa, y eso lo plasmamos en dashboard. Se comenzaron a hacer los análisis para conocer cuál es la causa raíz, qué se puede mejorar”, mencionó Amalia Armendáriz.
"Mi año de practicante en Schneider me hizo agarrar mucha confianza en mí misma. Poder yo proponer, ser más proactiva".
Esta experiencia le permitió conseguir realizar prácticas profesionales en Schneider, donde siente logró alcanzar su mayor aprendizaje.
“Mi año de practicante en Schneider me hizo agarrar mucha confianza en mí misma. Poder yo proponer, ser más proactiva, no tener la pena de poder decir algo.
“Me dio mucha más seguridad para poder lanzarme a hacer las cosas y siento que ahí avancé tanto en Tableau, que yo fui quien lideró el training de dicho software porque yo era la única que lo conocía, fue el training para todo mi equipo”, dijo.
Sus aprendizajes en grupos estudiantiles
Como parte de la sociedad de alumnos de su carrera Amalia tuvo la oportunidad de ser coordinadora del proyecto social Niños Regios, el cual termina con una fiesta del Día del Niño.
Este proyecto fue un reto debido a que a la celebración asisten miles de niños de primarias públicas e intervienen el municipio de Monterrey y la Secretaría de educación.
“Fue un gran reto de que todo el semestre me enfoqué mucho en sacar el evento y aparte nos dieron cuatro meses para realizarlo, no es nada. Conseguir los patrocinios también fue un reto”, recordó.
Otra de las dificultades que atravesó fue el adquirir confianza para proponer y generar iniciativas en las empresas en las que estuvo.
“En el ámbito profesional sí sentí miedo a lanzarme, tanto en Disney como en Schneider, el miedo a atreverme a que puedo aportar, no nada más ellos me aportan a mí, sino que yo también tengo que aportarles.
“Creo que ese miedo fue el que me costó afrontarlo y una vez que lo logré sentí un cambiazo en mí, soy otra. La Amalia que entró hace cinco años a la de ahora soy totalmente distinta y creo que algo de lo que me marcó fue eso”, comentó.
"Creo que ese miedo fue el que me costó afrontarlo y una vez que lo logré sentí un cambiazo en mí, soy otra".
Ya con empleo en los próximos años Amalia espera convertirse en emprendedora y ser una más que representa a las mujeres en el ámbito de los negocios.
“Siempre me he querido ver como una mujer muy exitosa, empresaria, ser mamá. Además, me gusta mucho aprender. Cada vez que siento que estoy aprendiendo me motiva, quiero más”, sostuvo.
Entre otros logros, fue reconocida en diez ocasiones como el empleado con más alto desempeño de la semana en Schneider Electric de 2020 a 2021, donde también se le reconoció por impartir un curso sobre la herramienta de análisis de datos Tableau Desktop.
También obtuvo el 1er. lugar en Conexión Tec en la categoría de “Propuestas de Mejora” por un proyecto en la línea de envasado en RAGASA en 2020.
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