La egresada recibió el reconocimiento más prestigioso que otorga el Tec de Monterrey en el área de arte y cultura y encaminó su pasión para crear una academia
A los tres años su camino en el arte comenzó a través del ballet; a los cinco, tuvo su primer acercamiento formal a la música y comenzó a estudiar piano, y al poco tiempo, el canto y el teatro se incorporaron a su agenda.
Artista, emprendedora y líder, Carolina Urbano Pineda compartió parte de su experiencia en esta trayectoria artística en donde sigue acumulando logros. Uno de los más importantes para ella, la creación de una academia de artes.
“Estudié Mercadotecnia y Comunicación en el Tec campus Estado de México y fui parte de distintos equipos representativos de arte y cultura, también estudié piano en el Conservatorio Nacional de Música por siete años”, comentó la egresada.
Emprendiendo en el arte
Para Carolina, la música va más allá de interpretar piezas, presentar exámenes o realizar presentaciones públicas; así como alimentamos nuestro cuerpo físico, explicó, también es importante alimentar al alma.
“Tu cuerpo lo alimentas comiendo bien y haciendo ejercicio; con la música, alimentas a tu alma y tu mente, esto es igualmente importante”, compartió.
Al estar involucrada en distintas disciplinas desde pequeña, ella soñaba con un lugar en dónde conjuntar las actividades que tanto le apasionaban.
“Desde que empecé con el piano a los 5 años, de ahí ya no paré. Seguí con la danza y la música, pero sí era un poco estresante el estar yendo a la escuela, luego al Conservatorio y luego a la academia de danza.
“Entre mi mamá, mi hermana que también baila y yo, decíamos: imagínate un sólo lugar que involucre las tres disciplinas que tanto nos gustan, teatro musical, danza y música. Fue un sueño común entre nosotras y ya cuando entré a PrepaTec se empezó a desarrollar”, comentó.
En 2014, ese sueño se vio materializado con la inauguración de Up:Stage, academia de artes en donde Carolina es cofundadora y actual directora musical.
“El nombre de Up:Stage lo creamos a partir de la conjunción de nuestros apellidos, Urbano Pineda; el término completo quiere decir sobre el escenario, es algo que no sólo aplica para la música sino también para la danza y el teatro. Es prepararte para el escenario.
“Está la parte formativa, pero al final creemos que el arte es para compartirlo, hay que presentarlo y estar arriba del escenario. Nuestro lema es: nos apasiona tu talento”, explicó la egresada.
Carolina compartió que desde Up:Stage buscan despertar en las y los estudiantes la motivación de ir a clases para presentar finalmente en un escenario ante su familia lo que han aprendido.
“Para mí, lo más significativo es ver cómo transformas la vida de las y los alumnos. Logramos inculcar en la mayoría un amor por el arte; hemos tenido alumnos desde los tres hasta los 70 años de edad”, detalló.
La egresada destacó que ya han presentado musicales en donde se han visto involucrados estudiantes de las tres disciplinas en un mismo escenario.
“Fomentamos mucho la responsabilidad y el trabajo en equipo; ya lo hemos puesto en práctica al montar musicales en donde tenemos a estudiantes tocando con la orquesta en vivo que acompaña a los chicos y chicas de danza y teatro”, dijo.
En cuanto a las clases de música, la academia Up:Stage, además, certifica a las y los estudiantes que lo deseen a través de los exámenes de la RockSchool para que puedan continuar con sus estudios y comenzar una carrera profesional musical en instituciones especializadas.
“No hay magia, para lograr lo que quieras hay que ser constantes y disciplinados”
Una trayectoria de logros
El paso por el Tec de Monterrey campus Estado de México de Carolina Urbano se caracterizó por los diversos reconocimientos y logros que fue acumulando desde que ingresó a la PrepaTec.
“Desde mi tercer semestre de preparatoria aquí en el Tec, comencé a realizar mi servicio de becaria dando el taller de piano. Al principio no me animaba porque el taller también era para estudiantes de profesional y eso para mí era imponente.
“Pero decidí tomar el reto y eso me ayudó muchísimo. Ya había dado clases individuales pero nunca a un grupo de más de 10 personas, todos más grandes de edad que yo”, compartió.
A lo largo de su trayectoria en PrepaTec y en la carrera, Carolina fue miembro de equipos representativos del campus como los de canto, teatro y danza folklórica; también participó en el evento ‘Festival de la canción’, en donde cada artista presenta una obra musical de su autoría para competir a nivel nacional con todos los campus del Tec.
En aquella ocasión, Carolina obtuvo el tercer lugar nacional, de entre cientos de participantes en dicho festival. Por todo ello, al finalizar sus estudios profesionales, recibió el reconocimiento más prestigioso que el Tec de Monterrey otorga: el borrego de oro en el área de arte y cultura.
Alimento del alma
Como lo destaca Carolina, la disciplina de aprender a tocar un instrumento, actuar o bailar, tiene muchas ventajas más de las que aparenta.
“El arte es algo muy íntimo, te hace conocer tus propias debilidades e inseguridades y por consiguiente, te vuelve una persona más sensible y empática con los demás.
“Yo lo veo con los niños que están en nuestra academia; en lugar de estar distraídos viendo cosas con violencia o que no son aptas para su edad en redes sociales o en la televisión, están aquí aprendiendo un arte pero al mismo tiempo desarrollando muchas otras aptitudes y habilidades útiles para la vida”, finalizó.
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