Con el objetivo de despertar el sentido humano en sus alumnos, la PrepaTec Chiapas desarrolló un proyecto a beneficio de los niños del Hospital de Especialidades Pediátricas de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.

A través de la clase de cálculo, enfocada a volúmenes de sólidos de revolución, los estudiantes crearon piñatas de material reciclado. Esta tarea implicó la recolección de residuos, el diseño de las piñatas y la elaboración de las mismas, así como su donación.

“Parte de lo que como profesores y profesoras de la PrepaTec hacemos es diseñar actividades retadoras que saquen del aula el conocimiento, por eso le dimos un giro al diseño original del proyecto que era académico”, aseguró César Pérez, director de la PrepaTec y LiFE.  

Las piñatas fueron entregadas a los niños del Hospital de Especialidades en el marco de la celebración del Día del Niño.

De la clase al sentido social

Con el trabajo conjunto de las diversas áreas del Tec y del apoyo de Eugenia Clementina Arrieta, directora académica del área de matemáticas, el proyecto se cristalizó.

Una vez definido el proyecto los profesores y profesoras involucrados optaron por rediseñar el planteamiento original de impartir una clase tradicional y apostaron por la innovación social, mientras que se realizaron acciones altruistas.

La planeación se enfocó a dos vertientes: el aprendizaje mediante la realización de piñatas basadas en residuos y la innovación social, al donarlas a niños con situaciones especiales del Hospital de Tuxtla Gutiérrez.

“Nuestra intención es que nuestros estudiantes tengan una reflexión y que su trabajo no sólo consista en aprender matemáticas, sino que pueda tener un impacto para con la comunidad”, mencionó el director de Preparatoria y LiFE.

Responsabilidad social mediante la donación de piñatas

Las piñatas son el resultado del trabajo de los alumnos del Tecnológico de Monterrey de un semestre. El siguiente paso fue preparar la intervención social y la donación de las mismas.

Este año la entrega de 25 piñatas realizadas por alumnos se llevó a cabo en el Hospital de Especialidades Pediátricas en Chiapas.

“El sentido de poder hacer esto es desarrollar también en nuestros estudiantes esa agencia de cambio que tienen y esa responsabilidad social para poder apoyar a personas que tengan situaciones delicadas”, confirmó César Pérez.

En la clase los alumnos se enfrentaron al reto de recolectar material, diseñar desde cero y materializar cada una de estas. Para esto aplicaron sus conocimientos de cálculo y el uso de materiales reciclados, además de creatividad.

Carlos Abud Palacios, alumno de la PrepaTec Chiapas, opinó sobre la experiencia y dijo:

"Me la pasé muy bien realizando este proyecto. Creo que fue una gran forma de aplicar los conocimientos de cálculo aprendidos en clase en una actividad interactiva y manual, además de enfocarla en un objeto que será para una buena causa, como es la celebración con los niños del pediátrico".

"Nuestra intención es que nuestros estudiantes tengan una reflexión y que su trabajo no sólo consista en aprender matemáticas". - César Pérez.

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